Una pequeña flor

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Narra Lauren

Vivir en Nueva York seguía siendo estresante como lo era desde hace 4 meses que me mudé a esta gran ciudad...a la gran manzana.

Recuerdo que hace 4 meses me volvía loca al saber que tenía que salir para ir a la escuela de artes y caminar entre un mar de gente.

El transporte no era mi salvación, tomar un taxi era un reto y el metro...ese lugar me daba mucho miedo.

Mi última clase estaba por terminar y hoy estaba lloviendo demasiado. No quería salir del Instituto, no llevaba abrigo o algo con que cubrirme.

No había duda, moría de hambre dentro de la escuela o salía y me empapaba.

Muy bien...ahora que hemos tenido un gran avance en esta clase es tiempo de que les diga cuál es su primer proyecto el cual entregarán en la segunda semana de mayo - saqué mi libreta y una pluma para anotar lo que la maestra decía - voy a querer que hagan una melodía, escriban la letra y presenten una canción, pero no quiero cualquier canción, busquen inspiración, están en Nueva York, hay mucha gente, muchas cosas que pueden ver, entreguen un trabajo que inspiré a los demás y los haga creer en lo que escribieron...tengan un buen día.

Cerré mi cuaderno y guardé todo en mi bolso, bajé al primer piso y antes de salir del edificio marqué el número de la persona que más extrañaba.

¿Lauren? ¿Estás bien? - su voz hacía que la extrañara más.

Hola mamá - suspiré y una lágrima recorrió mi rostro.

¿Qué pasa hija, está todo bien? -suspiré y asentí aunque ella no me pudiera ver.

Si mamá, solo te extrañaba, sé que sólo llevo 4 meses aquí pero de verdad te extraño, no sé si pueda estar 5 años lejos de ti - mi voz sonaba como un susurro.

Yo también te extraño hija pero no te preocupes, vas a conocer a gente nueva, amigos, y tal vez encuentres al amor de tu vida, disfruta estos 5 años, prometo que iré a visitarte en navidad - asentí nuevamente.

Falta mucho... - escuché su risa que me contagió.

No te preocupes mi amor, el tiempo pasará rápido, tu hermana y yo estaremos contigo abriendo regalos y no te dejaremos sola ni en navidad ni en año nuevo, faltan nueve meses pero te llamaré cada semana y tal vez podamos ajustar nuestro tiempo para hacer video llamada, tu hermana, tu y yo - sonreí, vi la calle y seguía lloviendo.

Ok mamá...tengo que colgar, por favor dile a Kate que la extraño mucho y que la quiero - limpié las lágrimas que aún seguían aferradas a mis ojos.

Yo le diré amor, ten un buen día, te quiero - suspiré.

Yo también te quiero mamá, bye - terminé la llamada y guardé mi celular en mi bolso.

Me acerqué a la salida del colegio y el guardia de seguridad abrió la puerta para mí.

Gracias Robert - me despedí de él y miré la calle.

Afortunadamente el semáforo estaba en rojo, crucé la calle y caminé rápido hasta el siguiente cruce.

El agua estaba haciendo efecto en mí, tenía frío y mi ropa estaba húmeda.

Corrí las siguientes 9 cuadras porque todos los taxis estaban ocupados, mis pies me dolían pero no paré hasta que llegué a mi lugar favorito desde hace 4 meses.

El viento llegó de golpe a mi cara, suspiré y abrí la puerta, la campana de la entrada se escuchó, entré limpiando mis zapatos en el tapete que decía "bienvenidos" con letras doradas, acomodé mi cabello hacia el lado izquierdo y mire el lugar.

Una pequeña flor - One-shot AlrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora