Cambio De Esencia [MLB] [Yaoi]

Capítulo 5: Mordida.

Marino/Marinette

Maldito Chat Noir... ¡Agh!.

—¿Marino?.—Reaccione al oír la dulce voz de Adrien.

—Oh, l-lo siento, pensaba en... Alguien.—Murmuré con molestia.

—Así que alguien...

—¡No es lo que crees!, ¡Y-Yo... S-Solo... B-Bueno...!.—¿Por qué siempre se me lengua la traba?.

—No te preocupes, no me debes explicaciones.—Nerviosa suspire ante su sonrisa. Como quisiera contarte todo Adrien... Pero no puedo.

—Llegamos.—Dije al ver la panadería frente a nosotros.—Ayer hice unas galletas, por si quieres.

—Oh, genial.—Adrien pareció feliz. Me alegro...

Entramos al lugar y fuimos directo a mi cuarto, no fui tonta y quite todos los recortes.

—Iré por las galletas, esperame aquí por favor, Adrien.

Este asintió con una sonrisa. Me apresure en buscar las galletas, pero como soy alguien muy torpe manche mi camisa.

—Grandioso Marinette...

—¿Marino?, ¿Estas bien?.—La voz de Adrien me sobresalto.

—Ah, si, subo ahora.—Dejando la mancha de lado subí la bandeja, arriba me cambiaría.—Lamento el retraso, aquí tienes.

—Se ven deliciosas.—Clamo, yo reí. Mientras el sacaba una aproveche en quitarme la camisa, eramos chicos, supongo no le importaría, he visto que los chicos no les importante estos actos.—¡¿Q-Qué haces?!.

Ladeé la cabeza para encontrar sonrojado a Adrien.

—Manche mi camisa, solo me la cambio.

—¡¿F-Frente a m-mi?!.

—¿Los chicos no hacen eso?—Cuestione curiosa.

—¡Claro que no!, ¡E-Es vergonzoso y-y...!

Note como Adrien no dejaba de ver mi pecho, que raro... Acaso... ¿Adrien es gay?, ¡Hay no!

—A-Adrien... Podrías... Dejar de verme, me cambio en un segundo, ¿si?.—Solté buscando una camisa, raro, ¡No encontraba ninguna a mi gusto!.

—¿Y-Ya?—Adrien se había cubierto los ojos, era adorable, no evite reír.—¡N-No te burles!

—Disculpame, es solo que eres muy lindo.—Adrien me miro molesto, o algo cercano, pero su expresión cambio repentinamente.

—¿Qué le sucedió a tu cuello?—Alce una ceja confuso.—Tienes una... Mordida.

A mi mente la imagen del galante Chat Noir vino. Me cubrí con rapidez.

—¡No es nada!, ¡Nada de nada!

—Marino...

—¡D-De verdad solo fue una broma de un amigo!

Joder, y yo sigo sin camisa.