Hinata... por favor ¡Quédate quieto!

El primer día o mejor dicho noche.

No podía dormir, rodó para un lado y luego para el otro. Suspiró mientras se estiraba . Urgh no entendía como algo tan pequeñito y delgado podía hacer tanto ruido. Hinata por favor... ¡duérmete!. Sugawara se dio cuenta de que no le servía de nada seguir luchando por dormir, así que levantó la cabeza ligeramente, a duras penas para observar a su alrededor, encontrándose a primera vista con un libero muy dormido y destapado.

Sugawara se percató derrepente de las bestias que dormían en ese lugar, ¿Cómo era posible que pudieran dormir con semejante serenata?. Al lado derecho del libero se encontraba un Tanaka durmiendo con su cara "ruda", balbuceando alguna tontería mientras babeaba ligeramente. Cuando continuó con su escaneo de la habitación, al lado del que era el "defensa-lateral-más-escandaloso-del-equipo" se cruzó con la expresión de pocos amigos de Daiichi y en el instante en que sus miradas se encontraron le recorrió un escalofrío por toda la espalda, al lado de él había un Asashi con el pelo suelto y una mirada sin alma, muy similar a la del primer partido de la spring high. Bueno... rodó los ojos y volvió a suspirar al parecer los de terceros estamos unidos de nuevo, pensó, ya que kageyama, que dormía al lado de la bestia (Hinata), descansaba muy cómodamente de lado, de cara hacia el pequeño y para su sorpresa y horror Hinata estaba "tranquilamente" durmiendo. Todos esos ruidos que a ÉL le estaban provocando insomnio a Shouyou ni siquiera le inmutaban.

- Hey~- Les dijo Suga-san a los demás.

- Hola- Respondió Daiichi sonando derrotado.

- Hola- Suspiró Asashi sonando aplastado.

Después de eso todos procedieron a observar con una mirada ya sin esperanzas al pequeño que producía todos sus males ...Y de la nada el milagro ocurrió, Hinata estornudo y comenzó su búsqueda por el calor, primero comenzó a rodar hasta chocar con una pared (un fuerte golpe sí, ¿le afectó?, por supuesto que no) Luego, al no encontrarlo comenzó a removerse hasta llegar hacia Kageyama, en donde finalmente se acomodó a gusto entre los brazos y se hizo un lugar en el pecho del pelinegro, quedándose quieto, QUIETO Y EN SILENCIO.

Una sola mirada entre los tres bastó para que comenzarán a actuar, pero ¡¿Cómo?! , ¡¿Cómo iban a mantenerlo quieto?! La solución no se veía tan difícil después de todo...

Cuando Kageyama despertó se sintió ligeramente más cálido de lo usual, como si un pequeño animalito se hubiese colado en su cama.... Tal vez un perro o más bien un cachorro

Un momento...

Sí había un pequeño cachorro... pero este tenía el pelo de color naranja y él lo estaba abrazando. Uhg, ¡lo iba a matar!, ¿Qué se creía poniéndolos en una posición tan vergonzosa?

Se percató, luego de haber pasado la impresión inicial al ver el rostro de idiota-adorable de Hinata, y su "Oh-Dios-de-verdad-lo-mataré" de que la bola energética compulsiva que tenía entre sus brazos tenía una nota pegada en la frente de la cual se leía:

"Querido Kageyama-Kun dejamos a tu cuidado al pequeño Hinata, puesto que en las noches no nos deja dormir y debemos estar en nuestras mejores condiciones para ganar las Nacionales, ¿verdad?, así que desde ahora hasta el resto de lo que dure el campeonato es tu responsabilidad, ¡buena suerte! Con cariño: Sugawara, Daiichi y Asashi ❤."

Esperen, esperen. ¿Él debía...? ¡¿Qué?!

- ¿Kageyama-Kun?, ¿Por qué tienes la cara tan roja? - Preguntó un adormilado Hinata.