Aquel día que todo cambió

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Aquel día que todo se vino abajo era una calida tarde de verano antofagastino, cuando mi papá llega muy alterado y nos reune a todos en la sala de estar para comunicarnos que lo habian ascendido, todos lo felicitamos y alegramos por la noticia todo iba muy bien hasta que agregó la idea de que su nuevo trabajo se encontraba en la cuidad de La Serena y que ya tenia todo pensado para vivir mejor que como viviamos en antofagasta, algo en mi hizo que no reaccionara, esa frase me hizo caer como a un pozo sin fondo y mientras caía veía tantos recuerdos, no escuchaba lo que mis padres me decian ni tampoco a mi hermano que habia notado lo extraña que me sentia, mi mente se nublo por completo y no sabia que pensar, todo se iba abajo, como me iba a ir si me quedaba el ultimo año de colegio y mi
noviazgo con Sebastian estaba en su mejor momento, habiamos dado el paso de dormir juntos en mi casa y de ahí se suponia que la relación se tornaria mucho más seria y de respeto pero esto, esto cambia todo, pense en mis amigos, en Catalina y Esteban que eran mis mejores amigos desde que tengo uso de razón,  nada nunca nos había separado pero un cambio de cuidad es muy fuerte para cualquier amistad por muy solida que esta sea, no sabia que decir, la piel se me puso fría y blanca, no queria llegar a una cuidad y comenzar todo desde cero, mi vida completa estaba allí y no queria que nada cambiara, dios pero como es posible que todo se termine en un segundo, sabia que mi vida perfecta habia terminado, todo se habia acabado y tener que explicar esto fue lo mas dificil que me ha tocado vivir. Cuando logre aterrizar lo unico que me nacio hacer fue romper en llanto, y pense en llamar a Esteban primero, el sabría que decir en un momento así.

Yo si te queríaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora