Capítulo 1: El comienzo de la soledad
13 Enero 2013....
―Esto fue tu culpa, ahora logro ver todo Megan tu provocaste todo lo que me está pasando, mi madre tenía razón, desde que comencé con el futbol americano nadie es mi amigo, son solo un par de ratas en busca de popularidad, y en tu caso en busca de sexo ― termine la frase en un susurro pues aún le quería demasiado a Megan porque a pesar de todo el engaño ella estuvo ahí para mí.
―Logan, amor tranquilo no sabes lo que dices― mascullo tapándose los ojos, no quería que la viese llorar
― ¿No sé lo que digo? Por favor deja de mentir, tu sabes que todo lo que digo es verdad tú le contaste a Elías ¿no?, me traicionaste― Ya no me quedaban lagrimas para derramas así que me arme de valor y la mire a los ojos para comprobar que estaba en lo cierto, y así fue…
―Perdóname por favor, el solo quería lo mejor para ti, tu futuro era en el equipo Logan― me abrazo y sentí un escalofrió recorrer cada centímetro de mi cuerpo.
―Mi futuro era en el quipo... ¡¿Mi Futuro?! , deja de fingir Megan solo haces que me decepciones más, tu sabias lo que yo quería hacer con mi futuro, sabias mi sueño… tu sabias mi vida y a pesar de todo me traicionaste― irradiaba rabia, ella destruyo mi seguridad
―Tu no sabías lo que querías Logan, por favor solo quería ayudar― se alejó momentáneamente de mí y me miro a los ojos y de un momento a otro las lágrimas de Megan se detuvieron ― Tú tienes todo esto planeado… Logan te creía mejor persona. Vete al diablo― se levantó y se fue…
No tuve momento para procesar todo lo que dijo pero me sentía mejor así, solo. Aun me quedaban dos semanas con el yeso en mi pierna y verlo me hacía recordar cada golpe que recibí y mi cuerpo se estremecía tan solo al intentar recordar lo que paso.
Esta era mi vigésimo cuarta semana sin ir al instituto reprobaría en año por inasistencia pero no me importaba, esta era otra luna llena más y yo sigo siendo un perdedor, un cobarde, un hipócrita, alguien que nunca debió existir.
Cuando Megan abandono mi cuarto tome mi navaja y comencé a cortar mis piernas, me sentía valiente haciendo daño pero me deprimía aún más cuando me daba cuenta que el daño me lo hacía yo.
Mis muslos sangran, la navaja que sostengo en mi mano vuelve a desgarrar más carne de mis piernas, no me permito llorar pero si torturarme con los recuerdos, recordando cada palabra ‘Logan desaparece, vete con tu padre que fue ese mismo fracaso que tú’, sus risas inundan cada centímetro de mi mente cada insulto vuelve a mi mente ‘Idiota, perdedor, bastardo…’ pienso en desaparecer, miro la navaja que sostengo y visualizo las píldoras para dormir, pero aunque lo deseara con la vida había algo que me lo impedía.
―Hijo por favor debes alimentarte― susurro aquella mujer por la cual yo seguía en este mundo.
―Gracias mamá pero no tengo apetito ahora― mis muslos ardían, la culpa me consumía pero no quería que la mujer que me trajo al mundo sienta que me pierde…
― ¿Sabes que siempre puedes contar conmigo?― me di cuenta que mi madre lloraba al otro lado de la puerta, se escuchó un sollozo ahogado, quería levantarme del suelo y abrazarla, pero no dejaría que me viese así… la haría pedazos.
―Si mamá, ahora descansare,… Gracias por todo― necesito abrazarla.
―Hijo, Te Amo― masculló ahogándose con su llanto.
Sus palabras me llegaron, no quiero seguir engañándola, debo contarle todo lo que me paso, quien fue, todas las decepciones que he sufrido en menos de un año.
―Má, entra― no podía levantarme, mis piernas ya no las sentía como para ponerme de pie.
Mi madre iba vestida de blanco, se dejó su pelo natural un rubio ceniza. No veía su cara hace mucho tiempo, cuando salía a comer me fijaba que no hubiese nadie en casa. Llevaba unas ojeras las cuales daban señal de que no dormía bien y lloraba mucho y eso era mi culpa...
―Hijo, ¿por…porque haces esto?― estaba impactada, no sabía qué hacer y se quebró, se arrodillo a mi lado y comenzó a llorar, no soportaría que siga llorando por mí.
―Primero que todo… te necesito fuerte y a mi lado ante cualquier cosa, ¿Puedo contar contigo?, y deja de llorar… yo sé que tú eres fuerte.―
―Si me prometes que no te volveré a ver así― sus ojos estaban hinchados y su mirada llena de compasión.
―Lo prometo má, este será el cambio de todo― me permití llorar y liberar todo con mi madre.
15 enero 2013…
Hablar con mi madre me libero de una carga emocional enorme, me dio muchos consejos pero a la vez me dijo cosas que me dieron a pensar mucho más: ‘Megan será tu único amor’, por lo que yo se Megan y mi madre no se conocen, aunque Megan vino durante seis meses a visitarme, antes y después de mi licencia y nunca supe si hablaba con mi madre para entrar, en fin me siento feliz, alegre, nuevo… pero no indestructible como desearía.
Hoy iremos con mi madre a hacer todos los trámites para cambiarnos de ciudad al otro lado de Santiago, veré la luz del sol con mis propios ojos y no solo los rayos que entran a través de mi ventana.
―Logan, ¿Estás listo?― masculló aquella mujer que ahora irradiaba felicidad.
―Más que listo Má― la abrace y la bese en su mejilla, quería que supiera todos los días cuan agradecido estaba de ella.
Esto es solo el comienzo...
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Ficțiune adolescențiMegan Gonzales lo mejor y lo peor de mi vida. necesito escapar, no quiero morir. Followers por siempre