Just a story? (L. Lawliet y tu)

Capítulo 8

Hola buenas noches, aquí vengo yo de nuevo con uno de mis capítulos, en esta ocación quiero mandarle un saludo especial a una gran lectora llamada L.Pawliet .Ella es muy buena Lectora y ha leído mi fanfic desde el inicio, aparte es una creativa y talentosa escritora, por lo que recomiendo su novela "Soy fuerte por fuera pero débil por dentro" :3 :3 :"3

-¿Qué hacemos con él? –Decía K con mucho nerviosismo –Cálmate K, tengo todo completamente planeado –dijo Zack con su habitual tono vanidoso –Ayúdenme a sacarlo –Y entre Zack, Kevin y Gabriel, sacaron a L fuera de Wammy's –Hace mucho frío esta noche –dijo G temblando –sí, y eso es realmente bueno para nosotros dijo Z – ¿Para nosotros? –Dijeron K y G al unisonó – tu eres el que quiere al mocoso fuera de Wammy's – concluyeron –ya cállense ¿sí? –Respondió Z con un tono de molestia muy notable –está bien –dijeron y el silencio inundo el lugar. 10 minutos luego, a las afueras de Wammy's se estaciono un taxi de color negro y detalles plateados. – ¿Dónde quieren ir? –dijo el taxista con tono amargo y el rostro fruncido. –Llévenos a la Catedral de Winchester por favor. –está bien vamos. –Fue un largo camino, los jóvenes iban golpeando y descobijando a L, quien solo quedo con una pequeña franelilla y bóxer. El taxista no pudo ver u oír lo que pasaba en la parte de atrás ya que el auto tenía un vidrio ahumado que no le permitía saber que ocurría atrás.

-Espérenos un momento aquí –dijo Zack bajando la ventanilla. –está bien dijo el hombre de semblante amargado. –Apúrense bájenlo – y entre los 3 bajaron a la víctima y lo acostaron en un escalón. Volvieron al taxi y se dirigieron al orfanato dejando a L solo de noche y en ropa interior.

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En Wammy's

10:00 am y L sigue sin aparecer ¿estará enfermo? –se decía ___ mientras se dirigía a su habitación, pero por curiosidad ella se acercó a la puerta de su compañero de pasillo.

Tock, tock –no se oyó nada –Tock, tock –y no había un alma – ¿Se habrá perdido otra vez? –pensó __ al no encontrar al chico en su habitación, caminando a paso acelerado se dirigió a la oficina de Watari, quien se encontraba hablando por su celular, al ver a la niña pidió disculpas y colgó -__ ¿Qué haces aquí? Deberías estar dormida -__ asintió. –Watari haz visto a L -dijo __ - si hace un rato estuvo conmigo pequeña ¿por qué la pregunta? –L no está en su habitación ni lo he visto en un buen rato me tiene algo preocupada y si le ocurrió algo –dijo haciendo una carita triste –bueno pequeña es cierto, el joven L no debe estar por fuera a estas horas vamos a buscarle. Y ambos recorrieron todo el edificio de forma fallida.

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En la catedral

-Ay mi cabeza, pero que me paso –dijo L despertando mareado, luego una oleada de frío congelo hasta la última fibra de piel del joven Lawliet. – ¡Dios! –exclamó el niño, al percatarse de que se encontraba en prendas menores sin el más mínimo abrigo.

- ¿Cómo llegué hasta aquí?, ¿Quién me hizo esto? –pensaba L mientras frotaba sus manos para crear fricción y así calentarse un poco. –A lo lejos pudo ver un pequeño costal roto, con unos retazos de tela. No sería lo más higiénico, pero se mantendría un poco abrigado. El chico de ojos grises se levantó con las pocas fuerzas que le quedaban, mientras que sentía que sus huesos se desprendían uno a uno, el frío había hecho que todo su cuerpo se entumeciera impidiendo así el movimiento fluido. El joven iba de camino hacía el costal de telas con la esperanza de conseguir un pequeño abrigo para pasar la noche. Al llegar al costal, tomo todos los retazos de tela y se sentó en una banquita a darse calor.