Capítulo 3

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Luke

Después de que Bracken apareciera y desapareciera con un humor de perros, Ricky se fue a consolarlo. Yo, por mi parte, decidí invitar a Logan a dar un paseo. Ese chico tenía algo especial, además de una preciosa cara. Desde el principio me llamó mucho la atención.

Entré a la carpa y allí estaba él, acomodando unas pequeñas pero preciosas flores celestes en su cabello. Las mismas hacían contraste con sus ojos. Me quede mirándolo embelesado por unos segundos, hasta que me obligué a quitarle la mirada de encima y hablarle.

- Hey, ¿Qué haces?

- Hola, Luke –Dijo sonriendo.- Cambio mis flores, las anteriores se estaban marchitando.- Terminó la frase, mientras miraba su reflejo por última vez en el pequeño espejo que tenía en su mano.

- Te quedan preciosas –Dije casi en un susurro. Él me miró sonrojado y sonriendo tímidamente.- Oye, ¿Te gustaría ir a dar un paseo por el campamento conmigo?

- Claro- Dijo levantándose y saliendo de la carpa conmigo.

Caminamos, dejando atrás las carpas y la cabañas de los coordinadores. Teníamos la tarde libre, así que nos internamos en el bosque. 

Charlamos de todo y a la vez de nada. Hablamos de cosas serias y de estupideces. Cuando decidimos descansar, nos sentamos debajo de un árbol. Yo apoyé mi espalda en este y Logan su cabeza en mis piernas extendidas.Faltaban como unos treinta minutos para la puesta del sol, y desde allí se verían perfectamente los últimos rayos de sol colarse entre los árboles.

- Luke, ¿Sabías que elijo el color de mis flores según mi estado de ánimo?

- ¿A si? 

- Sí. Por ejemplo, hoy estoy calmo y sereno como el cielo, entonces elegí flores de su color.- Dijo, mirándome desde su posición.

- Es un buen criterio de elección.- Respondí mientras acariciaba su cabello.

- Luke… Por favor no hagas eso...

- Lo siento. ¿Te molesta?

- No, me encanta, pero… Me da sueño…- Me reí suavemente y seguí acariciándolo, mientras veía como, poco a poco, Logan cerraba sus ojos. Decidí dejarlo dormir y despertarlo para ver el sol caer. Luego de unos minutos, lo desperté. 

- Logan, despierta.- Le dije al oído mientras lo zarandeaba levemente.

- ¿Qué...qué pasa, Luke?

- Pensé que te gustaría ver la puesta de sol.- Dije sonriendole.

- Sí, me encanta, gracias por despertarme.- Dijo incorporándose. Se sentó a mi lado y apoyó su cabeza llena de flores en mi hombro. Un escalofrío me recorrió la espalda y me sonrojé. Este chico definitivamente me ponía nervioso. Este sentimiento se incrementó cuando tomó mi mano derecha y empezó a jugar con ella, doblando mis dedos y juntando su palma con la mía. Lo mire con una sonrisa un tanto tierna y abochornada, y el me respondió con una sonrisa cargada de ternura y amor. Nos quedamos mirando fijamente a los ojos hasta que me di cuenta de que, después de la confianza que habíamos tomado en estas últimas horas, Logan tenía que saber la verdad.

-Logan, yo… Debo decirte algo.

- ¿Qué quieres decirme?

- Es sobre… Lo que me gusta… Es decir, mis gustos.

-Luke, ya hablamos de la comida. Amas la pizza y las hamburguesas de Mc Donald’s.

- No, no sobre esos gustos- Dije riendo suavemente. Notaba el ambiente un poco más ligero, pero tenía un nudo en la garganta de los nervios.

- Yo… Logan, te tomé mucha confianza en estas últimas horas y necesito decirtelo. Espero que no lo tomes a mal, son solo gustos.- Logan cambió su posición y se sentó frente a mí, con las piernas cruzadas.Me miraba directo a los ojos. Yo no pude soportarlo y bajé la mirada. Estaba muy avergonzado por lo que iba a decir. No es que me avergonzara de lo que era, pero no me gustaba decirlo. Abrí la boca para hablar, pero Logan me interrumpió.

-Luke, ¿Eres gay?- Lo miré con sorpresa y detenimiento, observando que gestos o muecas hacía, algo que me demostrara que pensaba sobre eso. Lo único que encontré fue una sonrisa serena y unos ojos calmos como el cielo.

-¿Co… Cómo lo sabías?

- No lo sé, lo presentí.- Luego de estas palabras, volvió a su posición anterior, con su cabeza sobre mi hombro.

- Y… ¿No te molesta?

- Claro que no, Luke, yo también soy gay.- La sorpresa no fue tanta porque, vamos, si se ve tan bonito y afeminado con esas pequeñas flores en su cabello. Pero, de cualquier manera, una confesión así impacta un poco a cualquiera, hasta el que más lo suponía.- Luke, ¿Vamos al lago?

- Claro.

Nos levantamos y comenzamos a caminar. Íbamos hombro con hombro, charlando y riéndonos. Lo ví de reojo y noté que tenía sus mejillas color rojo fuego, y, sorpresivamente, tomó mi mano y la unió a la suya. Me sonrojé de inmediato, pero lo miré y le sonreí. Él, abochornado, bajó la mirada, sonriente.

Llegamos al lago y estaba tan calmo que parecía un espejo. Logan tiró de mí hacia este. Nos acercamos a la orilla, me soltó la mano, se agachó, y me salpicó toda la remera. Mi boca formó una o perfecta y lo salpique de vuelta. Seguimos así hasta que se veían perfectamente la luna y las estrellas en el cielo nocturno.

- Creo que deberíamos volver. -Le dije, mirando mi reloj.- La fogata empieza en veinte minutos.Se me acercó, tomó mi mano y caminamos de vuelta al campamento. 

Estábamos por llegar, pero todavía nadie podía vernos. En parte por la lejanía y en parte por la falta de luz. Sin embargo, cuando giré a ver a Logan, este estaba sonrojado, incluso más que antes de que tomara mi mano. Cuando iba a preguntar qué pasaba, se giró hacia mí y acercó sus labios a los mios. Me dió un pequeño beso, un piquito. Cuando se separó, nos sonreímos mutuamente y luego el salió corriendo a toda velocidad hacia el campamento. Me quedé unos segundos parado en la playa y, a continuación, salí corriendo tras el.

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⏰ Última actualización: Jan 18, 2014 ⏰

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