- ¡Leo!
- ¿Que?
- Gracias por acompañarme, he tomado buenas fotos gracias a ti - lo abrace mientras caminabamos
- Mmm
- Vamos, yo se que estas feliz por estar con Ken - pique sus costillas - Es más, siento que solo aceptaste venir conmigo para ver a Ken
- ¿Yo? - hice un puchero y me ignoro
Después del espectáculo de luces, regrese a casa con Leo, ya estaba amaneciendo pero aun no tenia sueño, así que cuando llegamos a su casa empecé a molestarlo.
- Hyung - estaba acostado en su cama tratando de dormir - ¡Hyung!
- ¿Que? - hablo somnoliento
- Este... Yo...mmm... Creo que tengo algo de Ken - susurré a su lado
- ¿Enserio? - estaba apuntó de dormirse
- Leo, como puedes ignorarme cuando hablo de Ken - hice un puchero
- ¿Que tienes de Ken?
- Un...mmm... Un cuaderno, pero no se si es de Ken
- ¿Como no sabes? - trato de mantenerse despierto
- Bueno, creo que si es de Ken, ya que dice en letras grandes "Propiedad de Ken" - Leo suspiro y me quito el cuaderno
> No puedes abrirlo ahí dice claramente - hice un puchero y trate de quitárselo, cuando lo abrió pareció sorprendido- ¿De donde lo sacaste? - parecía más despierto
- A Ken hyung se le cayo de la bolsa, iba a devolvérselo pero tu te lo llevaste y Hongbin me alejo, pero se lo devolveré, ahora dámelo
- Espera - salió de su cuarto, no tenia ganas de levantarme así que sólo cerré mis ojos y me dormi
...
- ¿Que hay ahi? - trate de mirar pero Leo lo cerro - Oye yo lo robe dámelo - intente quitárselo pero no me dejo
- ¿Lo robaste? - me miro con el ceño fruncido
- Bueno, técnicamente puede verse como un robo pero se lo iba a devolver - hice un puchero - Ya, dime que tiene escrito
- No deberías saber - se levanto y camino hacia la cocina, pero antes de que llegara me subí en su espalda
- Dámelo, yo también quiero ver - trataba de quitárselo pero sus brazos eran un poco más largos que los mios
- ¡No!
- ¡Leo!
- ¡Que no!
- No me hagas usar mi súper ataque
- ¡Han Sang Hyuk bajate!
- ¡No hasta que me lo enseñes!
- ¡Que no!
- Tu lo pediste - mordí su hombro y el se quejo, terminamos tirados en el piso, yo encima de él
...
- Entonces... ¿Cuando se lo regresaremos?
- Dentro de unos días - susurro Leo mientras comía