Las estrellas brillan por ti

Olivia

- Oh no!...Arthur frena, acabo de ver un cachorro al costado de la autopista!

- Ahora mismo señorita Mercier, solo dejeme ver donde puedo colocarme para no interferir con el trafico 

Su chofer acomoda el Lincoln Continental al costado de una autopista que esta en su horario mas ajetreado, se han alejado al menos un km de donde Olivia vislumbro al pequeño animal asustado, inmediatamente ella busca destrabar la puerta que lindera al borde de la asfaltada, Arthur la detiene justo antes de abrirla

- No señorita, deje que yo busque al cachorro, es muy peligroso para usted caminar tan cerca de los vehiculos que van a altas velocidades, espere en el auto por favor, no me tardo

- Esta bien Arthur, pero tenga cuidado y por favor, tenga en cuenta que esta muy asustado por lo cual acérquese despacio y tratelo con cariño

- Si, pierda cuidado señorita

Olivia observa por el vidrio trasero del auto como él  va a recoger al animal, el hombre lleva a su lado desde que tenia 7 años, aun recuerda la primera vez que su padre se lo presento como su nuevo guardaespaldas y chofer, ella tan pequeña frente a un robusto hombre de tez negra, daba miedo entonces, y aun lo causa, pero ella sabe que solo es la apariencia, por dentro tiene un corazón enorme y entre ambos existe un cariño familiar. Ya lo ve regresar con el cachorrito, se pierde entre los grandes brazos de Arthur, ella baja la ventanilla y él le entrega al chiquito que tiembla aun por el miedo.

- Muchas gracias Arthur

- No hay porque señorita, creo que tiene lastimada una patita, tenga cuidado

- Pobrecito! Arthur vayamos a que lo revise el Aida, creo que aun esta en la estancia

- Inmediatamente

Le sonrie tocandose la boina y se dirige hacia el asiento del conductor, ella acaricia con enfasis al perrito, le parece que no tiene mas de un par de meses, es blanco con varias manchas marrones distribuidas por su cuerpo, sus orejas son casi tan grandes como su cabeza y sus ojos se ven grandes y asustados, Olivia le sonrie y levanta para quedar cara a cara

- Hola pequeñin! no tengas miedo, voy a cuidar de ti

El cachorro mueve apenas su cola y luego saca su lengua para darle un lenguetazo, Olivia se ríe, adora a los animales y es la parte que mas le gusta de poseer dinero, no tener inconvenientes económicos a la hora de poder salvar animales del abandono, llevarlos al predio que compro con el fin de allí curarlos, cuidarlos y buscarles en lo posible un hogar, su amiga Aida es la veterinaria a cargo junto con Ryan que es el encargado del cuidado y limpieza del lugar con ayuda de Tobias, su hermano, un adolescente bastante introvertido pero que ama colaborar con el fin del sitio. Animals are Family es el nombre del campo, son 8 hectarias de verde con varios espacios creativos para que los perros disfruten jugando, esta sectorizado por tamaño y edades, hay dos piletas para que se refresquen durante el verano, aunque el calor de San Francisco no es agobiante, y la casona vieja donde se refacciono para tener un sector de enfermería, el deposito de alimentos y las oficinas.

El vehiculo frena en el camino empedrado de la casona justo cuando Aida sale a recibirlos.

- Olivia, como estas? A quien haz encontrado hoy?

- Hola Aida, mira este pequeñin, lo hemos encontrado al costado de la autopista, no se como pudo haber llegado hasta allí solo, no quiero creer que algún desalmado lo haya arrojado sin mas!

Le acerca el cachorro para que lo vea y ésta lo toma en sus brazos, lo alza y lo observa en distintos ángulos.

- Físicamente no parece tener nada, no veo sarna o dermatitis, tampoco lo noto con desnutrición, puede que llevara poco tiempo abandonado, igualmente le haremos unos análisis para estar seguros que no padece ninguna anomalía