Quisiera un futuro de poesía
Que fueran trovar leyes y decretos
Que los seres no tuvieran secretos
y amar fuera la única rebeldía.
Quisiera un mañana sin utopías.
Sin vidas envidiando a otras vidas,
Sin reproches por etapas perdidas, ni seres con sus historias vacías.
Que dos manos
fueran un buen contrato
Que el amor no viviera privaciones
y honrar fuera nuestro único mandato.
Que el cariño impusiera sus razones
Que el alma no supiera de maltratos
y los votos fueran modo avión desaparecido
