Fui a tu casa corriendo.
Eran las 00:00, no entiendo por qué eligieron desconectarte tan tarde.
Tu madre me recibió entre sollozos y juntos subimos a tu cuarto, en donde se encontraban dos doctores tomando tu pulso y tu actividad cerebral.
Nos dejaron decirte adiós rápidamente y luego pasó.
La máquina se apagó junto con tu vida.
Te fuiste, y contigo una parte de mí. Quizá la más importante.
Lo que sé es que desde ese día, ya ni volví a amar a nadie más.
Desde ese día ya no me encariño con nadie.
Porque al fin y al cabo, todos se van.
Siempre es así.
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En la noche
Short StoryMatthew ama a Jennifer con todo su corazón, pero ella no lo sabe. ¿Podrán estar juntos sin arruinar su amistad?