2. Kink - Spanking

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Bajó las escaleras bostezando y despeinándose los oscuros cabellos, con solo un pantalón de gimnasia gris puesto, dejando su torso blanquecino medio trabajado expuesto.  Fue recibido por un delicioso olor a café caliente, frutas y miel. Caminó directo a la cocina en busca del desayuno y el pequeño príncipe que, obviamente, fue el que lo preparó. 

Tal fue su sorpresa al ver a Jimin medio recostado en el desayunador, meneando sus caderas y con un diminuto short de jean puesto. Se acercó a paso lento sin hacer ruido y se posó detrás del cuerpo menor, recorrió con la mirada las bien depiladas y morenas piernas para luego posar su vista en el redondo trasero levantado, donde inmediatamente posó una de sus grandes manos y acarició, provocando que el menor se volteara.

 Se acercó a paso lento sin hacer ruido y se posó detrás del cuerpo menor, recorrió con la mirada las bien depiladas y morenas piernas para luego posar su vista en el redondo trasero levantado, donde inmediatamente posó una de sus grandes manos y ...

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—Hola hyung— se volteó y enredó sus manos en el cuello del más alto.

—Buen día pequeño— saludó con voz ronca y posando sus manos en las nalgas de Jimin, atrayendolo a su cuerpo para juntar sus labios en forma de saludo— y, ¿por qué andas con un short de mujer enfrente mio, acaso estás tratando de seducirme?

—Hyung— le regañó sonriendo— no estoy tratando de seducirle, es solo que me gusta usar este tipo de short, ¿a usted no le gusta?

—Como no va a gustarme si mira como te deja el culo— le sonrió de costado.

—¡Hyung!— le golpeó levemente en el brazo, a lo que el otro rió— vamos a desayunar



{···}



—Muy mal, bebé— una palma se estrelló contra el trasero de Jimin— te has portado mal, ¿quieres decirle a daddy que hiciste?

—Le abrí al repartidor de pizza vestido con mis shorts— cerró sus ojos recibiendo otra palmada. 

—¿Y qué más?— acarició la piel desnuda del chico. 

—Le pedí que sacara el dinero de mi bolsillo trasero— tercera palmada. 

—Discúlpate— demandó con voz firme y golpeándolo nuevamente. 

—L-Lo siento, daddy— Yoongi sonrió y acarició los glúteos rojos del menor.  

El mayor se levantó de la silla en la que estaba con Jimin en sus brazos, encaminándose hacia la mesa y recostándolo ahí.

Vacaciones y Yoongi {y.m}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora