Ella disfrutaba leer como pocas. Y ahí está la diferencia. Una mujer que lee, que sabe hacerlo verdaderamente, sin prejuicios, ni etiquetas pretenciosas, es un una mujer que ama, que sabe hablarte de las cosas más bonitas de la vida, que no te deja irte, y es una mujer que no teme, que no escapa. Y cuando estás a su lado lo notas. Porque no te quieres ir, y quieres seguir escuchando lo que dice, y no temes, y no escapas, y te encanta… entonces también amas.
En su tiempo .
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Tu sexo me sabe a naranja:
RomanceTodos se hacen daño a su manera, y la forma que se me volvió manía fue escribir sobre ti, apesar que ya no estás aquí.