Una carta nunca entregada

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Al amor de mi vida:

He decidido enviarte esta carta, pues,
ya hace tiempo que no nos vemos y a decir verdad tengo mucho que contarte. Quizá no te interese lo siguiente, igual y si quieres puedes dejar de leer en el momento que gustes pero en este pequeño pedazo de papel te entrego todos y cada uno de mis recuerdos convertidos en tinta.
Y quiero que sepas que con esto no intento nada, lo único que quiero es sacar de adentro todos estos demonios que dejaste al marcharte de mi lado, es difícil el tener que despertar y ya no verte del lado izquierdo de la cama, o tener que salir de casa y ya no poder besar tus labios en señal de despedida, deseando que el día terminara, para llegar y verte de nuevo ahí en la entrada con el beso entre tus labios que siempre me aguardaba.
Se muy bien que tú también despiertas con mis memorias en la cabeza, que me extrañas igual que yo a ti.
Quiero sacarte de aquí adentro, no se con exactitud dónde queda eso, tal vez del corazón o del cerebro, no se que es lo que me tiene tan aferrado a tu recuerdo. Tan solo quiero que termines de leer esta carta, termina cada palabra y mientras las estés leyendo por favor, intenta sanar las heridas en mi alma, convierte cada uno de mis recuerdos en cenizas. Junto con ellos llévate las ilusiones de lo que pudo ser algún día.
En fin, espero que esto me sirva a mi para sacarte de mi vida lo más pronto posible.
Ah, y por cierto, te escribí algo en mis noches de desvelos, tómalo como una despedida, ámalo como a ninguna otra cosa en el mundo, pues lo hice pensando en ti.

"Y te amé a ti como a ninguna, desde el momento en que te vi, despertaste en mi locura, no hay ojos más hermosos que los tuyos en este planeta, ni mucho menos alguien cuerdo que no enloquezca con solo verlos.

Y amé cada sonrisa que desprendías de entre tus mejillas, mejillas que al mismo tiempo se sonrojaban por un beso o una palabra, que yo articulara.

Te amé a ti por completo, desde afuera hasta adentro, vi en ti lo que varios ciegos no pudieron, te amé a ti y solo a ti con alma, corazón y cuerpo.

Sin embargo todo tiene su final, pues hasta las más hermosas flores se marchitan desde el primer pétalo, hasta la última espina."

Un último suspiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora