C i n c o

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Ahora que entiendes que te quiero dejar atrás todo es más fácil.
Todo, hasta recordar a un él que fue y al parecer sigue siendo especial para mí.
Te debo contar, mini Kurt, que soñé con él. Y era todo tan lindo que no quería despertar.
Recuerdo que una vez le dije que no venga porque no podía gastar su dinero en eso. Realmente sí me importa su futuro y creo que debe guardar su dinero para la universidad, pero aquella vez fue pura cobardía de dejarle de gustar cuando me vea en persona. Realmente no tenía nada que esconder, pero yo sentía que era mejor a través de una pantalla.
En el sueño él venía a mi ciudad para un evento realizado por el lugar en el que estudio para toda mi ciudad, era en tiempo presente, lo que significa que ya había pasado Navidad.
En medio del espectáculo, decían que se sentían mal por no darles el abrazo de feliz navidad y les habían pedido a algunas personas que nos abracen a todos.
De pronto él llegó a mí y me abrazó muy fuerte, y yo empecé a llorar sin saber por qué, pues no le había reconocido. Entonces él me preguntó "¿Alguna vez te obligué a que me hablaras por teléfono en las noches?" Y la verdad la pregunta no tenía mucha coherencia, pero un sueño es un sueño. Le respondí que no, y él me besó la mejilla antes de irse a abrazar a alguien más.
Recibí, en mi sueño, un mensaje de él que decía "Me volví a enloquecer por ti" y esto otra vez tiene poca coherencia, pero no me importa demasiado.
Desperté del maravilloso sueño por una señora atolondrada que no sabe guardar silencio.
Desperté sintiendo sus brazos a mi alrededor.
Y, mini Kurt, ahora que intento olvidarte y te puedo pedir consejos te pido que me des tu opinión.
¿Le hablo, o no?

Cartas a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora