Es de noche, el cielo está despejado a pesar de la brisa, me siento vacía mirando hacia el cielo preguntándome qué pasaría si fuese un pájaro, si pudiese tocar las estrellas, si pudiese levantarme y flotar, me siento vacía pero ligera, tan ligera que podría volar, volar y no regresar... sería la forma más fácil de escapar, escapar de todos los problemas que tengo; ojalá pudiese volar tan lejos como quisiese, tan alto como quisiese pero no pasara, no soy un pájaro, esa es la maldita realidad, no puedo escapar de mis problemas solo puedo enfrentarlos y lo peor es que no sé cómo, no soy capaz de nada, soy una basofia, una inútil. Y esa es la razón por la cual estar aquí es más fácil, alejarte de los problemas siempre es más fácil y aquí puedo hacerlo...
Me gustaría estar aquí todo el tiempo, sin nada en que pensar, nada que me preocupe y nada que me lastime. Pienso en lo fácil que es volver mis pensamientos realidad, volver realidad el poder volar como las aves y tocar las nubes. Es tan fácil que me encantaría ponerle fin, sería tan fácil que... que lo haría ahora mismo, ¿que se sentirá morir? ¿Dolerá? ¿Que vería? Quiero saberlo, quiero sentirlo... quiero...—camine hacia la orilla Del Mar mientras me lo preguntaba, seguí caminando hasta que el agua cubrió mi cuello...— no se sentirá nada ¿cierto?. Muerte por ahogamiento, dicen que es muy dolorosa porque pierdes el oxigeno poco a poco pero la verdad es que no me importa, quiero saber, quiero sentir algo, lo que sea y si lo único que voy a poder sentir será el dolor de mi muerte, pues que así sea, no me importa nada ya... Veo una ola, es muy grande y no sé nadar... a llegado el momento.
Todo es blanco y ya no siento el dolor de hace unos momentos, es reconfortante, en cierto modo.
