Spaiking
El olor de la madera le llegaba hasta las fosas nasales pero los ojos vendados no le podían ayudar esta vez para admirar su alrededor, lo entendió desde que MinHo le pidió silencio y saco la palestina de sus anchos pantalones, sabía que el juego comenzaba ahí, que desde ese momento tenía que acatar todo lo que esté le pidiera por muy humillante que fuese, porque eso era lo que le gustaba, porque eso era lo que disfrutaba y como mayor placer obtenía.
Su miembro se alzaba orgulloso ante la tenue luz que apenas iluminaba la habitación, pero eso él no podía admirarlo al tener la vista prohibida por esa palestina en los ojos, el placer lo obtendría únicamente sintiéndolo, muchas veces MinHo le privo de ver, pero esto era algo que le daba más morbo a la situación, considerando que TaeMin amaba que le atara e hiciera con él lo que quisiera, estaba dispuesto a todo
La suela de los zapatos de cuero chocando contra la dura madera retumbó por la habitación, avisando que el juego daba inicio y que desde ese instante tenía que mantener su cuerpo ligero para evitar cualquier tipo de castigo, aunque eso a él no le incomodaba, después de todo era recompensarle según su pensamiento
Jadea en cuanto la dureza de una pala acaricia sus labios, los entreabre al sentir la presión, paseando la lengua de un lado a otro, saboreando el sabor de la madera que se le postraba, no escuchaba absolutamente nada de su amo, lo único audible era su respiración acelerada y el sonido húmedo de su lengua paseándose por la pala
— De pie – se atraganta el gemido que estuvo por lanzar, no tenía el permiso del amo después de todo. Acata la orden, poniéndose recto y con el corazón a mil, ansioso por el siguiente movimiento –
Siente el cuerpo ajeno recorrerle con la mirada, era una sensación de sentirse como un trozo de carne en medio de una manada de leones, la piel se le ponía de gallina y la garganta comenzaba a secarse, tantos años practicando esto y seguía sintiendo la misma emoción que la primera vez, solo que ahora más experimentado.
— ¿Vas a complacerme? – susurra el amo paseándose alrededor suyo, intimidándolo – Responde – murmura serio –
— Sí, señor – traga saliva ansioso, apretando los dedos de los pies, pese al frío que hacía en el cuarto y a estar desnudo con los pies descalzos, su cuerpo llevaba una adrenalina que le transmitía un calorcito en su bajo vientre –
No rezonga cuando esté tira de su mano obligándolo a caminar hasta la muy conocida mesa de cristal, no fue necesaria su orden simplemente se inclinó lo más que pudo, quedando en pompa recostado sobre la mesa empañándola a su paso por su respiración acelerada, incluso una gota de sudor le recorrió la frente
Está practica muchos creen comprenderla o saber ejercerla, pero aquello había llevado años para que TaeMin accediera y que MinHo tuviera el orden necesario para no lastimarlo de una manera que sea permanente, es decir, le gustaba dejar la piel del menor al rojo vivo, pero nunca a un punto de matarlo, disfrutaba su dolor tanto como su placer y para ello necesitaba tener los elementos completos para que sus horas en el cuarto fueran divertidas.
TaeMin muerde su labio nervioso por sentir el primer punto de acción que no tarda en llegar, chilla cuando la pala le golpea con fuerza los glúteos, resonando piel contra madera por toda la habitación, una excitación que recorrió todo el brazo de MinHo yendo a parar a su miembro erecto
Ansioso por más alza con orgullo la pala y la deja caer con la misma fuerza ejercida anteriormente para instalarse en las nalgas de esté, ganándose otro chillido de placer, sin pasar sus manos por él ya podía deducir que el menor se encontraba erecto y goteando
— ¿Esto te gusta? – cuestiona conteniendo el jadeo que estaba por escapársele –
— Sí amo, más por favor – suplica bajo un gemido –
— Mírate nada más, suplicando como una perra, humillante – escupe sobre su rostro, ganándose los jadeos del menor –
Azote tras azote su miembro se alza con mayor fuerza, potente y goteante esperando para penetrar el menudo cuerpo que se retorcía sobre la mesa de cristal totalmente empañado
La piel ajena estaba roja en un punto climax, incluso logro percibir alguna que otra rozadura en la curva del mismo, advirtiendo con abrirse y comenzar a sangrar, la sola idea de tener a TaeMin sangrando mientras gemía le excitaba aún más, era un juego duro que ninguno quería parar, ambos buscaban lo mismo, placer.
Un golpe más con la pala y el menor se retuerce bajo la mesa, alcanzando un orgasmo abrumador, dejándose llevar por los espasmos que le recorrieron hasta caer rendido y de no ser por las manos en su cintura hubiese recibido un buen golpe contra el cristal
— ¿Estás bien? – la pregunta que siempre mencionaba MinHo luego de su sesión con TaeMin, al menor le causaba cierta gracia pues esté sabia de ante mano que su amo jamás lo lastimaría de una manera incurable, pues el disfrutaba del mismo trato –
— Sí, estoy bien – El mayor frunce el ceño y le da una nalgada con la mano libre de la pala –
— ¿Cómo? – cuestiona alzando una ceja –
— Estoy bien, amo – sonríe mordiendo su labio inferior, aquello había sido con intensión del bien merecido golpe –
MinHo le devuelve la sonrisa y le pone de pie, tomándolo de ambas piernas para hacérselo de la manera que le gusta.
*
Como podrán notar los capítulos serán cortos pues lo que más queremos es enfocar la atención en el significado de cada cosa, no pondremos fecha alguna sobre las actualizaciones pues sería complicado cumplir con ello, sin embargo trabajaremos todo el staff para que el fanfic no se prolongue más de 3 meses, esperamos que para mediados de febrero ya esté finalizado
Una vez más, gracias por su apoyo y nos vemos el próximo capítulo
No olviden darle me gusta a cada capítulo y dejarnos su comentario sobre el mismo, estaremos leyendo en la tarde y responderemos dudas por medio de mensaje privado ya sea vía Facebook (Fukaeri) o aquí mismo en nuestro muro Wattpad
Saludos.
ESTÁS LEYENDO
ROOM 696 - 2MIN
Fanfiction"Nada de lo que ocurra en la habitación debe salir de aquí"