Desconocido (J-Hope Y Tu)

Capitulo 2

Capítulo con lemon
Ani 🐴
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Se paró del sillón para cerrar las cortinas de la sala.
Nos besamos toda la noche. Sus labios eran realmente exquisitos, luego de un rato nuestros besos se volvieron cada vez mas fogosos, buscaban algo mas...
Me recostó suavemente hacia atrás y puso sus manos a los costados de mi cabeza para apoyarse sobre mi pero sin aplastarme.
Comenzó a besar mi cuello dejando rastros húmedos. Realmente me volvía loca. Me miró fijo, rozó mis labios con los suyos y luego fue a mi oído
-No haremos nada que no quieras - dijo en un susurro ronco mientras mi piel se erizaba completamente.
Lo tome por el cuello y comencé a besarlo apasionadamente. Me sentía impura, era un desconocido, pero pude sentir el amor que tanto buscaba. San Siwon perdona mis pecados.
Luego comenzó a morder suave el lóbulo de mi oreja haciendo que yo soltara un pequeño gemido. Bajó otra vez a mi cuello mientras comenzaba a subir de a poco mi blusa, el roce de sus manos me daban cosquillas. Empezó a besar mi abdomen mientras yo acariciaba su suave cabello y mordía mi labio inferior. Terminó por dejarme en sostén y luego siguió por mi pantalón. Lo desabrochaba mientras me miraba con una sonrisa pícara. No dude en devolver el gesto alzando una ceja.
-Esto estorba - dijo mientras lanzaba mi pantalón al suelo.
Vi como se relamia al verme solo en ropa interior.
-Ahora tú- volviéndome a la picardía.
Se sacó toda su ropa muy rápido, quedando solo en bóxers.
No pude evitar pasar mi lengua por mis labios.
Nos volvimos a unir en un fogoso beso, pero ahora, comenzó a desabrochar mi sostén y cuando terminó, lo sacó y lo largo al mismo lugar en donde quedo mi pantalón, es decir, por algún lado de la sala, nunca sabremos donde quedó. Bajó con besos por mi cuello, llegando finalmente hacia mis pechos. Comenzó a lamerlos y apretarlos haciendo que estos se endurecieran. Yo, no mantuve ningún gemido. Continuó bajando por mi abdomen dejando un rastro húmedo hasta llegar a mi feminidad. Comenzó a besar alrededor de ella, provocándome un cosquilleo y unas ganas insaciables de besarlo, hasta que saco lo único que quedaba sobre mi cuerpo, en cuanto a tela. Y comenzó a lamer suavemente mientras mi respiración se aceleraba y con ella, mis latidos.
Por reflejo, arquee mi espalda.
Estaba por llegar a mi momento pero se separó.
-Uh?~
Volví mi cabeza para ver el por qué de tan repentino paro y cuando lo vi, ya se había quitado su ropa interior y estaba buscando algo en su billetera.
-Buscas algo?- Pregunte con la respiración acelerada.
Saco un pequeño sobre plateado y esbozo una pequeña sonrisa nerviosa.
Mi instinto me hizo sacar ese pequeño sobre de sus manos.
-Antes...- dije agitando el pequeño sobre, el cual deje sobre la pequeña mesa de café.
Necesitaba probarlo.
Comencé a estimular su miembro con mi mano haciendo movimientos verticales, hasta que de repente, lo introduje en mi boca casi por completo. Que bien sabe. Lo mire de reojo y pude ver satisfacción en su rostro, lo cual me motivó a hacerlo cada vez mas rápido, hasta que me separó de él.
-Veo que comenzó a gustarte el juego. Necesito hacerte mía, ya-
-Solo, hazlo- dije mientras me dirigía a la mesa donde deje ese pequeño sobre.
Lo abrí, le coloqué el preservativo y comencé a subir con besos pasando por su marcado abdomen hasta llegar a su cuello, el colocó sus manos alrededor del mio y nos hundimos en otro beso.
Me preguntó si estaba lista y solo asentí con mi cabeza.
Se acerco a mi cara para darme otro beso y me Susurró
-Debes decirme si te duele
-E-esta bien Hobi
Temblaba.
Me acostó nuevamente en el sofá quedando sobre mi. Puso su miembro en mi entrada, mientras una de sus manos se posicionaban en mis caderas. Formaba círculos haciendo que me llenara de placer, después pude sentir como me penetraba de manera delicada y lenta. Mis manos se aferraban en el sillón con fuerza. Si dolía, era la primera vez que hacía esto. No pude evitar mi expresión de suplicio a lo que HoSeok paró un momento para que pasara. Cuando mi cara cambió, el prosiguió. Entró del todo, arquee mi espalda y solté un gemido mas fuerte que los otros y le dedique una sonrisa. Me lanzó un guiño y comenzó a moverse dentro de mi.
Era realmente placentero todo esto.
Mientras continuaba con lo suyo, Con una mano comenzó a estimular mi clítoris. Por Dios! Esto es la gloria.
Pequeñas gotas, como las de lluvia, cubrían nuestros cuerpos.
Cuando vio mi cara, noto la satisfacción que producía en mi y comenzó a mover su mano mas rápido.
-M-as po-por favor- dije agitada
Él solo sonrió y no se cómo hizo, pero comenzó a dar embestidas cada vez mas rápidas. Me tomó con ambas manos de las caderas, elevándolas un poco para mayor comodidad, mientras yo me tomaba del sillón, por los costados de mi cabeza. Luego de unas cuantas embestidas más, salió de mí y se levantó, colocando sus rodillas en la alfombra y moviéndome para acomodarme según su criterio, yo estaba en mi nube. También coloco mis rodillas en el piso y mis brazos en el sillón, quedando en forma de "L" invertida (ustedes imaginen). Comenzó a besar mi espalda y a dar pequeñas mordidas en mis hombros, sentí como jugaba con mi entrada. Me penetró suavemente mientras apretaba mi trasero con las manos. Cada vez se introducía más rápido, lo que produjo que ambos llegáramos al clímax, en gemidos ahogados y roncos, fue hermoso. Terminamos por recostarnos en la suave alfombra blanca, uniendo nuestros cuerpos y las pequeñas gotas. Nos tapamos con la manta que cubría el suelo y nos dispusimos a descansar. Puse mi cabeza sobre su pecho mientras el acariciaba mi cabello y me susurraba cosas lindas al oído. Yo podía percibir como su corazón casi se salia de su cuerpo.                                                            Cuanto me alegraba haberme caído y sangrar en aquel parque. 

Se sentían las gotas de agua golpear en mi ventana, se veían los refucilos a través de esta y se escuchaban los truenos fuera de mi casa.
Nos dormimos abrazados.
Al otro día, cuando me desperté pude sentir como me miraba.
-Buen día, princesa - mi piel se volvió a erizar por completo.
-Buen día - y le regale una pequeña sonrisa mientras me acurrucaba en entre sus brazos, apegandome a su pecho.
*Qué estás haciendo?*
Fue lo único que pude pensar en ese momento...