capítulo 2

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By Julia
Desperte envuelta entre las sabanas de mi cama y mi padre me observaba como dormía
-Al fín despiertas, estoy por irme saldré de viaje otra vez
-¿Cuando tardarás? -dije con la voz adormilada aún-
-No lo se, tal vez una semana o dos ¿tienes dinero suficiente?
-Si, no te preocupes
-Bien entonces me voy, me llamas si necesitas algo -dijo mientras se levantaba de la cama-
-¡Oye! -volteo a verme nuevamente- ¿me dejas las llaves el auto? -sonrió y metió la mano a su bolsillo del pantalón para sacar las llaves y arrojarmelas en el aire donde yo las atrape- gracias -le devolví la sonrisa-
-No salgas tan tarde de casa
-Esta bien papá
-Y ya deberías levantarte, son las doce del medio día
Mi padre salió de la habitación y me volvi a tirar en la cama, mientras revisaba mi celular, tenía un sin fín de mensajes de Natalia, había pasado ya una semana desde aquella noche en el antro en la que conocí a Lena, desde entonces no habia podido dejar de pensar en ella mientras ignoraba por completo a Natalia, ya ni siquiera revisaba sus mensajes para responderle, a quién quería ver era a Lena y esperaba con ansias el día en que me la encontraría por "casualidad", ya tendría tiempo después para terminar con Natalia, sabía que estaba haciendo mal, pero si veía a Natalia en estos días probablemente Lena se daría cuenta de que yo soy la chica que sale con su hermana y no quería correr riesgos, había estacionado el auto a varios metros de su casa durante unos días y siempre que salía Natalia, salía Lena con ella, lo cual me parecía extraño ya que antes Natalia siempre iba sola a todos lados.
Baje a la cocina y me prepare un café, me di un baño y sali de casa con el auto para ir a casa de Natalia; al llegar note como iba saliendo el auto de su mamá de la cochera, me acerque más para ver quién conducía, ¡era Lena! Y lo mejor es que iba sola, la seguí a una distancia respetable hasta llegar a un supermercado, se estaciono y entro a la tienda, hice lo mismo, tome un carrito de compras y empece a buscarla aventando de vez en cuando productos dentro del carrito; al fín logre verla en el área de ropa, me acerque lentamente hasta colocarme a su lado
-¿Buscabas algo en especial? -ella volteo a verme y sonrió-
-Hola! ¿cual era tu nombre?
-Julia -le sonreí- yo no me olvide del tuyo Lena
-Lo siento, suelo olvidar todo muy fácilmente
-No te preocupes, que casualidad que te encontrará aquí, ¿vienes por las compras?
-Si, mi hermana no quiso acompañarme así que vine sola, pero ya termine, no era la gran cosa
-¿Ya te vas entonces? -le dije asustada y ella se rió al ver mi expresión-
-Si, ya compre todo lo que necesitaba
-Bueno, es que si bien recuerdo me dijiste que si nos volvíamos a ver saldrías conmigo -le dije apenada y con miedo de que no lo recordara, pero ella solo sonreía-
-Vaya, supongo que no recibirás un no por respuesta
-No podría permitirmelo -me reí con ella-
-Ok, convenseme entonces ¿a donde me llevarás? -me dijo con una sonrisa en los labios, la cual no podía ser mejor motivación para mi-
-No lo se, ¿te gusta la comida italiana?
-Si, ¿me llevarás a un restaurante italiano? No conozco ninguno bueno de por aquí
-No, algo mejor, cocinare yo misma para ti
-Wow ¿en serio? ¿y que tal cocinas?
-Ya verás, te aseguro que te va a gustar
-Bien, me has convencido
-¡Si! -dije victoriosa- ¿mañana puedes?
-Si ¿a que hora te veo?
-¿A las 8 esta bien?
-Claro, ¿pasarás por mi? Te doy mi dirección -me quede en shock, si iba por ella a su casa Natalia me vería y todos mis planes se arruinarían-
-¿No crees que sea mejor vernos en otro lado? Digo, tal vez a tus padres no les guste que salgas con una chica
-Creo que soy lo suficiente mayor para tomar mis decisiones, además ¿quién dice que seremos algo mas? -volvió a reirse de mi- Te veré en mi casa ¿si? Al menos que no quieras ir por mi
-¡No! No es eso, dame tu dirección y ahí estaré
-Bien -saco una pluma de su bolsa y me dio su mano en señal de que esperaba que le diera algo-
-¿Que? -dije anonada y se rió de mi otra vez-
-¿Tienes donde anotar?
-No, no salí preparada -me reí con ella-
-Bien -tomo mi mano y empezo a anotar su dirección en ella, sus manos eran suaves y el contacto físico con la mía me encantaba- No llegues tarde -me sonrió-
-Llegaré incluso antes
-Eso espero -se acercó hacía mi y me dio un beso en la mejilla- nos vemos -empezo a caminar
-Hasta luego -le dije mientras agitaba mi mano emocionada por todo-
Empecé a caminar hacía el lado contrario, iba a necesitar comprar varias cosas para la cena con Lena, me sentía emocionada a mas no poder al grado de ir sonriendo por los pasillos como idiota y una señora se acercara a mi con cara de preocupada preguntandome si estaba bien
-mejor que nunca, pensé-
Tome varias cosas de los estantes, sin duda haría que la cena se convirtiera en la mejor noche para Lena, en verdad me gustaba y me moría de ganas por conocerla mas a fondo, ahora solo me quedaba esperar a que llegará mañana.

La Nieve CaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora