Tu mundo y el mio! (sin terminar)

Son los recuerdos

Son ellos los que nos hacen nostálgicos , melancólicos , románticos . Son los que hacen vibrar de nuevo nuestras emociones, no nos dejan nunca estables porque siempre volvemos a recordarlos y nos olvidamos de lo que esta pasando.
Sí los acuso a ellos, a los recuerdos de: secuestradores de momentos.
¿Cuantas veces las personas vamos perdidas por la calle recordando? ¿cuantas? ¿2 veces? ¿200? o ¿2000? Yo creo que lo mas sensato sería decir que millones de veces vamos recordando, sin aflojarle a la cuerdita que activa los recuerdos. Eso que ya fue hasta nos transforma, muchas veces no nos deja seguir, otras tantas nos deja amargados, sin esperanzas y muchas más nos ayuda y nos fortalece.
Pero un día dije, en voz alta: sería lindo no recordar. Les dije a algunos amigos a los que se les nota en la mirada una mente abierta, un alma progresista: ¿y si solo viviéramos el presente, sin pensar en el pasado y el mundo fuera mejor? ¡Que felices seríamos sin recuerdos que nos estanquen!
Pienso, porque todo lo lindo tiene algo de feo y es que luego no lo vamos a poder volver a vivir y que va a quedar ahí atras sin importar para algunos y para otros siendo el suceso más importante de sus vidas. A fin de cuenta no ganaríamos nada de ninguno de los dos modos.
Le cuento a mis amigos soñadores mi idea loca, les pido que la escuchen con atención y que se imaginen con precisión lo genial que encuentren en mi idea y palabras.
¡Seria hermoso amanecer con ganas de vivir el hoy, sin importar lo que pasó en el ayer porque no lo recordamos, sin pensar en el mañana porque no sabemos si existe! ¡Aa así aprenderiamos a amar, se amaría fuerte si el mundo fuera asi!.  Mal gastamos la mente usándola para recordar cosas que no vuelven que no tienen reversa, ¿y si pudieramos regresar el tiempo atrás? Sigo pensando que seria una pérdida de tiempo, no me atrevería a volver a revivir sucesos, no por ningún motivo o hecho en especial, si no porque creo que lo que paso tuvo que pasar y que estaba destinado a ser así, y que algo nos dejó y que para algo sirvió, el destino sabe lo que hace, a él le gusta jugar, y no es malo que juegue. Pero sí empeora cuando juega con el amor, con nuestro sentimiento más profundo. Por eso creo que si las personas no recordaramos no sufririamos tanto, no viviríamos frustrados por nuestras desiluciones, ni por las veces que nos rompieron el corazón y jugaron con nosotros.
Por eso sería lindo que dominara el corazón el alma, solo allí se almacenarian los sentimientos que valen la pena. No existiría el rencor, el orgullo, el malestar psicologico ni transtornos mentales a causa de problemas del pasado.