Mi futuro eres tu (Keveed)

Capitulo 1

Narra Kevin:

No recuerdo exactamente cuando fue que perdí mi cordura, no sé si fue cuando esta maldita guerra empezó o cuando él se fue.

Flashback (hace cuatro años)

Mire el reloj que estaba aún lado de mi cama este marcaba las 5:30 a.m., me levante, mire por la ventana de mi habitación, observando al otro lado de la calle la casa de cierto pelinegro, que desde hace ya un año y medio se había convertido en mi pareja volviéndose así la persona más valiosa en mi vida, quien dirá que terminaría perdidamente enamorado de uno de los Edd's. Podía ver la luz prendida de la habitación de doble D, este acababa de tomar una ducha, podía notarlo ya que estaba secando su cabello con una toalla además de que no tenía puesta su pijama. Una pequeña sonrisa se dibujó en mi rostro y me dirigí a darme un baño.

Salí del baño restregando una toalla sobre mi cabeza mojada mientras buscaba lo que me pondría para ir a la escuela. Decidí ir con una playera negra, unos jeans azules, mi gorra roja y mi chamarra de cuero negra. Baje a desayunar algo rápido y cuando me di cuenta que eran las 6:30 a.m., tome mi mochila, la llaves de mi moto y de la casa, me dirigí a sacar a mi bebe del garaje. Una vez afuera, pude ver a Doble D saliendo de su casa, lo llame y este dirigió su mirada hacia a mí con una sonrisa en su rostro. Corrí hacia el abrazándolo y robando un beso de aquellos deliciosos labios que me volvían loco.

-Buenos días Kevin, por lo que veo hoy te levantaste con mucha energía, jejeje- Dijo Doble D mirándome con un ligero sonrojo y una gran sonrisa.

-Siempre tengo mucha energía, y esto es gracias a ti, ya que tú eres la razón para que todos los días me levante sintiéndome el hombre más afortunado por tener al novio más lindo y tierno del mundo- El pelinegro se sonrojo hasta las orejas, al notar esto volví a besarlo- Bueno hay que irnos no hay que llegar tarde- Dije tomando la mano de mi novio.

El más joven asintió, mientras lo llevaba hasta mi motocicleta que estaba estacionada del otro lado de la calle. Subí sobre ésta, colocándome mi casco para posterior mente entregarle otro a Doble D, una vez que el pelinegro se subió, tome sus brazos pasándolos por mi cintura, para que este se aferrara fuerte a mí ya que Edd les tenía miedo a las motocicletas, una vez que me asegure que él ya estaba listo, partimos.

Al llegar estacione mi moto, tome su mano ayudándolo a bajar de esta, y nos dirigimos a la entrada, como siempre había un grupo de chicas que esperaban en la entrada, es realmente molesto lidiar con ellas ya que todos en la preparatoria sabían acerca de mi relación con el pelinegro, y aun así les importaba poco que él estuviera a mi lado. En ese momento pude ver a lo lejos a dos de mis mejores amigos Nathan y Nazz, ambos se abrieron paso entre la multitud de chicas que estaban frente a mí.

-Buen día Kevin, y muy buen día para ti Doble lindo- Dijo Nathan tomando la mano de Doble D y besándola.

-Oh, buenos días Nathan- Respondió Doble D con una sonrisa en su rostro.

-Nathan, desde tan temprano ya quieres morir- Lo mire amenazante mientras tronaba mis dedos.

-No Kevin relajate, además sabes que este lindo cuerpecito es tuyo... Bueno a menos que Doble D quiera algo más- Le guiño un ojo al pelinegro, que lo miraba con una sonrisa, mientras que yo estaba buscando la forma de no cometer un asesinato.

-Basta Nathan, no es bueno que molestes a Kevin desde tan temprano... Además no creo que quieras que Eddy te escuche coquetearle de esa forma a Edd, ¿o sí? jejeje- Hablo Nazz mirándole con una sonrisa llena de satisfacción.

-Nooo... es capaz de volverme una niña en una sola noche- Dijo este mientras hacia otras de sus dramatizaciones.

-Escuche mi nombre acaso están hablando de mi- Dijo una voz a nuestras espaldas.