Lo lamento, Nam, lo siento mucho.
Te juro que no es mi intencion, yo sólo quería que vieras lo que nos pasaba, nos encontramos en un estado de recesión, a punto de morir.
Recuerdas cuando empezó todo, tu si lo haces, entonces cuentamelo y repite lo mil veces. Ahora te das cuenta de que fue tu culpa, tu fuiste quien decidió rendirse, me engañaste, me mentiste, me ilusioneste, No!, me cree un mundo de fantasía yo sólo.
La novela que hicimos en décimo grado es muy parecida a nuestra situación en este momento y bueno, yo tendría el protagonismo ahora. Si, estoy embarazado y tu llevas dos meses casado, es extraño, en la novela tu deberías tener problemas económicos y yo... bueno yo sería el dueño de una mente suicida, pero no, de alguna manera siempre logramos creamos historias extrañas y poco normales.
Ken quiere hacerse cargo de nuestro bebé, debería dejarlo, ya sabes por aquello de las apariencias y que nuestras familias seguro estarían más unidas, ah... te extraño, de nuevo te pido perdón, cuando te enteres de esto, probablemente me encuentre en los Los Ángeles.
Quizás hasta este punto creas que todo lo digo tan sencillo, que no duele y tiene solución, no es así, no lo es, la gente siempre nos ah mirado como familiares, lo sabes y es imposible no llorar cuando recuerdo que el hijo que espero sera tu sobrino, adoptivo, pero la gente no sabe que ustedes me recogieron de un orfanato, lo siento, Nam, te daré esto el día de mi boda, al final de ella.
Para ese día, si mis cálculos no van mal, tendré Siete meses de embarazo y Jan habrá reclamado la paternidad como suya, se que fue un error el haber aceptado tu "amor", aún duele.
Tus palabras, las recuerdo tan vividamente que ahora mismo siento como si algo huebiese sido puesto como tapón en mi tráquea sin dar paso al oxígeno, igual que hace dos semanas, quizás es tarde.
Debí escribir esto en cuanto me entera, fui un idiota, incluso prepare una cena, cocine toda la tarde pero lo que recibí sólo fue una cadena de Oro de 24k con una carta para que me dejaras parado en el lumbral de la puerta.
Me case con alguien a quien realmente amo, lo siento, Jin. Sólo fuiste una distracción.
La cadena la compro mi madre, dice que te la regalaría en tu cumpleaños pero tuvo que salir del país.
Jamás fue más que un amor fraternal, Jin, siempre serás mi hermano, nunca serás un extraño y mucho menos un adoptado, ante todo y todos tu siempre serás mi familia.
Te amo, Jin, eres mi todo.
Por favor, Perdóname si te confundí, en serio lo lamento.
Eso decía aquella carta, ahora Perdóname tu a mi.
No pienso dejar a mi bebé sólo, y tampoco quiero que sea despreciado, mañana daremos aviso de nuestra boda, Jan me llevará a Rusia para los preparativos y regresaremos para la boda.
Sólo ahí no habrá marcha atrás, siempre tuyo, no mejor ya no, quien fue tuyo, Jin.
