Amor Prohibido- JB

Capítulo 1- Inicio De Clases

Primer día de clases, escuela nueva, amigos nuevos.
Es algo excelente pero al mismo tiempo incómodo, el no saber con quien trataré me pone nerviosa.

Mi nombre es ______ Brochu, tengo 16 años y vivo con mis papás en Los Ángeles, Estados Unidos.
Soy hija única y a veces creo que no deseada, la relación con mis papás es algo difícil, puesto que ellos no se llevan bien desde que tengo uso de razón, sin embargo no dejo que eso me afecte, algún día se darán cuenta de sus errores.
Bueno, actualmente  estoy por empezar las clases de preparatoria, algo diferente a lo que conozco, obviamente después de 3 años en secundaria te acostumbras y a veces es imposible no extrañarla. Al llegar a la dirección busco con la mirada a la secretaria desde la puerta de entrada, al encontrarla me dirijo a su escritorio el cual tiene una placa con el nombre de Annie Braun, para ser una secretaria de preparatoria es muy joven y bella, le calculo algunos 28 años

-Buenos días, ¿se te ofrece algo?- Pregunta sonriendo, puedo darme cuenta de su sonrisa, pareciera que tiene brillantina o yo que se, es muy blanca. Al verla de frente puedo ver que tiene unos ojos azules muy bonitos que van de la mano con su blanca de piel y el cabello rubio, por cierto demasiado falso, maldito tinte.

-Si, vengo a recoger mi horario y número de loker- Le contesté amablemente y respondiendo a su sonrisa con otra de mi parte.

-Oh claro, ¿Me das tu nombre?- "¿También mi número?" Me dije y reí mentalmente por lo estúpido que hubiera sonado

-_______ Brochu- Al decirlo, la chica comenzó a teclear en su computadora para después mandar la información a la impresora, ésta al hacer su trabajo la secretaria tomó el papel entregándomelo.

-Aquí está tu horario y el número de tu loker junto con la contraseña vienen debajo - le agradecí y salí de ahí para dirigirme a mi próxima clase.

Álgebra
Educación Física
Literatura
Química
Ciencias Sociales
Español

"Vaya mierda de horario" pensé solamente al ver álgebra, digamos que no soy muy buena en ello.

Las dos primeras horas pasaron y era hora del descanso y salí sola, había hablado con una chica de nombre Kendra y un chico había tratado de  coquetear conmigo en física pero fuera de eso todo iba bien, iba...

Estaba caminando con dirección al comedor distraída en mi celular cuando choco con alguien el cual tiene la suficiente dureza para hacerme caer en un golpe seco al frío suelo.

-Niña estúpida, fíjate por donde vas- Al escuchar esa voz levanto la vista para enfrentarme a un tipo realmente enorme con tatuajes cubriendo uno de sus brazos & unos poco en el otro, su cabello era un color dorado con un peinando de lado el cual le daba estilo, sus ojos son impresionantemente  hermosos para alguien con esa voz gran gruesa, son un color miel claros que me hipnotizaron pues me quedé más tiempo de lo necesario viéndolos- Deja de verme, nunca te permití hacerlo

Fruncí el ceño al escucharlo hablarme de ese modo, me levanté rápidamente sin dejar de verlo y después le respondí:

-No eres nadie para decirme que hacer o no- Su mirada rápidamente se transformó a una oscura, sin siquiera conocerlo, supe que el tipo estaba enojado.

-Vuelve a hablarme de ese modo y te arrepentirás de siquiera haberme tocado- Su voz fue muy tosca y con cierta amenaza pero vamos, soy tan estúpida que jamás me quedo callada, pero creo que fue un error y ese pequeño error traería más consecuencias de lo que hubiera podido creer.

-Vete a la mierda chico- pasé por su lado no sin antes ser detenida por el para decirme fríamente:

-Te lo advertí niña- me soltó bruscamente y sólo me quedé ahí viendo como se iba.

Supe que no sería la última vez que cruzaríamos palabras.