capitulo 1

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Cerdito, gorda, marrana, deja de tragar

Las palabras que salen de mi madre, mi hermano, compañeros de la escuela, del trabajo y e incluso de personas que no e visto en toda mi vida

Miro mi reflejo en el espejo del baño del restaurante donde trabaja mi mejor amiga, que por cierto tiene 23 años edad, de echo es la única amiga que tengo ya que en mi escuela todos me rechazan, por la simple razón de ser gorda

El mundo es cruel y superficial, y muy contradictorio no lo olvidemos, si eres gorda, eres una tragona, si eres delgada estas enferma y así la llevamos cada vez más critica la sociedad...nunca están conformes con nada

Mi nombre es rapunzel corona y tengo 16 años, estoy en segundo de preparatorio y soy fan del mundo anime, soy más conocida como un otaku, si dime inmadura y torpe pero es mi única manera de salir de la realidad, también toco el piano y canto un poco

Pero a nadie le interesa porque, ya que para que alguien le guste, tengo que ser delgada y bonita....algo que no llegare hacer en un millón de años

¡¡¡Porque dios!!! – grite con frustración y levantando las manos en el aire de una forma cómica, después de mi momento de dramatización decido salir, el movimiento de los mereceros y las personas hacen que mi cuerpo vuelva a tomar el calor y mis odios duelan un poco

Me acerque a la barra, donde estaba Mérida atendiendo las órdenes para llevar de las personas, una vez que se dio cuenta de mi presencia sonrió con alegría

Y como te fue con Dylan – dijo con entusiasmo

Pues –

Recuerdo)

Mira Rehana...-

Rapunzel- le corrigió de forma amable – talvez no era una experta en las citas pero por lo menos sabia cuando iba a ser rechazada, además no es culpa del chico, Mérida lo había citado y el talvez pensó que mi amiga pelirroja quería verle, y termino dejándolo conmigo

Eres muy bonita creo...- trago saliva mirando mi corpulento cuerpo – pero no eres mi tipo, lo siento...podrías decirle a Mérida que la veo después-

Claro –

(Fin del recuerdo)

Sabía que era un pedazo de mierda –

No te preocupes, además soy más feliz así, anqué conozca algunos chicos guapos, no tienen casi nada que ver conmigo –

Mérida me miro de reojo y luego suspiro para volver con el cliente

Me senté en una mesa con un pastel de frutas mi favorito, mientras lo devoraba la campanita que indicaba la llegada de un nuevo cliente resonó, sin tomarle importancia seguí comiendo mi pastel

Mira a quien tenemos aquí – una voz burbujeante me está hablando, levanto la vista y veo a nada menos que a Astrid y su sequito de brujas, son las chicas que hacen de mi vida un infierno, Astrid es la razón de por qué las rubias somos tomadas como unas idiotas - la puerca – las chicas se rieron, - no crees que somos bonitas

Que hay con eso- dije llevándome un trozo de pastel a la boca

"que hay con eso"- Astrid repitió fingiendo que tenía mi grabe voz – deja de comer cerda, y danos esta mesa

Que?-

Aparte de gorda, sorda – dijo Matilde, era la más baja de las cuatro con el cabello corto de color naranja

Después de todo este tiempo, se podría decir que ya no me importaba, pero todavía lo hace, mi pecho se aprieta y tengo que mirar hacia otro lado, las chicas se ríen, tomo una respiración profunda antes de levantarme

The Games Of Love-jackunzelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora