Daniel

Capítulo 14

Tal como aseguró Sofía, a la una menos cinco estaba en la puerta de mi casa. La invité a entrar y fuimos a mi habitación.
-Había pensado una cosa - dijo ella muy convencida - podíamos pasarnos el día haciendo una sesión de fotos.
-Bueno, no es una mala idea - dije sonriendo.
Siempre me había gustado hacerme fotos y colgarlas en el Instagram.
Sofía sacó una cámara de fotos y me hizo una sentada en la cama, todavía medio dormida y sin haberme maquillado las pecas, como hacía siempre para que no se me vieran.
-¡Eh! - dije riéndome - eso ha sido a traición.
-Jaja sí, pero sales genial.
-Salgamos al patio que hay detrás de mi casa - dije mientras me ponía un peto - allí haremos fotos aluciflipantes.
-¿Aluci qué? - dijo ella extrañada.
-Aluciflipante.
- Eso no existe - contestó ella riéndose.
-Sí que existe porque me lo he inventado yo - dije traviesa.
Bajamos al patio. Era un enorme prado que estaba seco por el calor que hacía y porque no llovía.
-Vaya - dijo Sofía boquiabierta - ahora soy yo la que estoy aluciflipando.
-Te dije que esa palabra existía - contesté divertida.
-Está bien, pues ahora nos haremos llamar las " aluciflipantes sevillanas".
-Esto es de locos - dije yo entre carcajada y carcajada.
-Está bien, entonces seremos las "aluciflipantes sevillanas locas de remate" - dijo Sofía muy convencida.
Y así se quedó.
Nos hicimos fotos saltando en la hierba seca, riéndonos y haciendo la voltereta lateral, también abrazándonos y gritando como unas locas que éramos.
Se hicieron las tres y fuimos dentro de la casa a comer. Hicimos unos macarrones y nos los comimos tan rápido que casi ni los vimos. Después, Sofía me dijo:
-Me tengo que ir. He quedado con Lucía y otra chica que se llama Carla, ¿te vienes?
-No, gracias - no me apetecía salir con Lucía después de lo de ayer - estoy cansada. Nos vemos mañana.
-Está bien -contestó Sofía - adiós.
Cuando se fue, cogí mi móvil y me tumbé en el sofá. Me metí en el Instagram y colgué algunas fotos. En una de ellas estaba saltando en el aire con una sonrisa, y en la otra, estaba encima de Sofía riéndome en el suelo.
Vi que Sofía había colgado también algunas fotos ya. Una de ellas era en la que me había pillado en la cama riéndome y sin maquillarme las pocas pequitas que tengo.
En el comentario ponía:
Esta es mi nueva amiga "aluciflipantemente" loca. Yo misma nos nombro las "aluciflipantes sevillanas locas de remate"
Sonreí. Esta me las pagaría. Ya colgaría yo una foto suya.
Después me fijé en que había otro comentario. Era de Daniel. Ponía:
Vaya, ¿Y esas hermosas pequitas?
Me sonrojé. Menos mal que no estaba él delante. Mis pecas no son hermosas, me maquillo precisamente para que no se me vean y para no parecer tan pálida. Decidí llamarle poniendo la escusa de las pecas. Claro, que lo que en realidad quería yo era hablar con él. Marqué su número y esperé a que lo cogiera. Al cuarto pitido contestó.
-¿Hola? - preguntó con su voz suave.
-Esto...hola soy Diana - dije de carrerilla - solo quería decirte que mis pecas no son hermosas, de hecho me maquillo para que no se vean.
-Entonces déjame verte en persona sin maquillaje - contestó como si nada - Te espero en frente del centro comercial a las seis - y colgó.