Nuevo año, nueva etapa, adiós secundaria, hola universidad, se supone que debería estar al menos un poco emocionada por lo que ahora venía pero la verdad no lo estaba, en lo absoluto.
Unos jodidos golpes en mi puerta hacen que me despierte, me pregunto quién podría ser la persona que se atrevía a molestarme tan temprano, un día sábado y para peor en mis despreocupadas vacaciones de verano, estire mi mano hasta encontrar mi teléfono que se encontraba en mi mesita de noche y cuando vi la hora; Vaya! Si que me gusta dormir, para mi sorpresa no era nada temprano si no que eran exactamente las 3 de la tarde, y para que mi sorpresa fuera aún mayor tampoco era sábado, si no lunes, Joder! Maldito lunes, maldito despertador que no sonó, aunque programé al menos 5 alarmas cada 5 minutos, hoy tenía que ir a matricularme en mi nueva universidad y probablemente la persona que que estaba al otro lado, casi derribando la puerta, fuera mi hermosa prima que se había ofrecido a ser mi tutor, ya que mi mamá no podía porque no trabajaba y mi papá, bueno él no tenia tiempo, su trabajo era más importante.
De un salto baje de mi cama, casi yéndome de bruces, para poder abrir mi puerta, y ahí estaba una muy furiosa Lorena.
- Maria Jesús González Aedo! Más te vale tener una muy buena y convincente explicación por haberme dejado esperando toda la maldita mañana! - me gritó, wow, había usado mi nombre completo, aún sabiendo que lo odiaba, ella si que está enojada.
Rodando los ojos le respondí.- Buenos días prima hermosa, si, yo estoy muy bien gracias, y tu que tal estás? - grave error, el sarcasmo no mejoró la situación - Está bien Lore, lo siento vale?, me quedé dormida, las alarmas no sonaron o no las escuché - dije recalcando la frase en plural "las alarmas", y susurrando lo último - y ya sabes lo de siempre, me dormí tarde anoche y ... - suspire resignada - lo siento por hacerte perder tu tiempo, y gracias por venir, dame un momento, me cambiaré y nos iremos.
Ella me estudio unos segundos antes de suspirar y decir;
- Está bien, estaré abajo con mi tía, y lo siento por gritarte y ponerme así, solo que enserio quiero que hagas esto Jes!, tienes que seguir con tu vida de alguna manera, es importante para tus papás que sigas adelante y sabes que también lo sería para él, y debería serlo para ti también.
Dicho ésto se giró y salió de la habitación, dejándome con un dilema y gran dolor de cabeza.
Sí que sabia que para mis papás era importante que hiciera algo con mi vida y saliera adelante como todos decían, pero una cosa es decirlo y otra muy diferente es hacerlo, hace 6 meses mi vida había cambiado de una manera radical, todo se había acabado, mis sueños, mis metas, absolutamente todo, de la noche a la mañana ya nada tenia sentido, nada me importaba, todo se había ido a la basura, incluidas mis ganas de vivir.
Joder necesitaba un café, no, mejor un cigarro, mejor ambos, si, definitivamente ambos.
Ya sabiendo mis prioridades de aquella tarde, me dirigí al baño a asearme, luego tome un par de jeans negros, una polera gris manga corta y mis vans blancas, me detuve frente al espejo del baño y vaya! Mi ojeras eran enormes, apliqué algo de maquillaje para poder disminuirlas, algo que ya se había vuelto habitual, alise mi cabello, me rocíe perfume, que ahora me parecía demasiado dulce, y estaba lista, 20 minutos, tiempo récord para mi, ya que la rapidez no era lo mío, pero creo que Lorena ya estaba lo suficientemente molesta como para agregar más leña al fuego, antes de salir, tome mi bolso con mi teléfono, mis lentes de sol, junto las llaves de mi auto y por último la carpeta que contenía todo el papeleo necesario para poder matricularme.
Salí de mi habitación, bajando las escaleras casi corriendo, cuidando no caerme, era lo único que me faltaba, me encontré con mi prima y mi mamá sentadas en el living conversando algo en susurros, al momento en que llegué se callaron, lo ignore.
- Hola mamá, estoy lista Lore, podemos irnos cuando quieras - dije, mi mamá me miró con cara de pocos amigos, y ya sabia porqué, ella odiaba que me levantará tarde, la verdad no sé porqué, al parecer le molestaba verme en paz, según ella no la ayudaba en nada, sin tomar en cuenta que la única que hacia aseo en esta casa era yo, pero bueno, hablamos de mi madre.
- Al fin te dignas a aparecer, Lorena no tiene todo el día para esperarte, cuando entenderás que no todo gira en torno a ti María Jesús - dijo mi madre, no sabía si llorar de rabia o reírme en su cara por ser tan cínica, mierda si, tendrá el título de madre pero desde hace mucho tiempo no se comporta como una - Espero que no le des problemas a Lorena, ella está siendo muy amable contigo.
- Si mamá, no te preocupes - esto era rutina en nuestras vidas desde hace un tiempo, ella criticando mi vida junto con todo lo que hago, ya me había cansado de discutir con ella, prefería ignorarla, di media vuelta y me dirigí a la cocina a preparar mi café.
Con mi café en mi termo, salí de la cocina con dirección a la salida.
- Lorena te espero en el auto - dije, y salí de la casa con un gran portazo estableciendo mi punto.
Subí y encendí el auto, en la radio sonaba Kings of leon, que gran grupo, baje la ventanilla y encendí un cigarro, dios! Ya me sentía completa, solo quería una distracción, algo que evitara que volviera a la casa y le dijera a mi madre unas cuantas verdades, decirle que se bajara de su nube y se diera cuenta que ella no era la única que estaba sufriendo, esto era una mierda para todos, y cada uno batallaba con su dolor a su manera, sin tener que hacer sentir más mierda a los demás, como lo hacia ella.
Un golpe de puerta me saco de mis pensamientos, era Lorena que había subido al auto, ella no sabía que decir, se le notaba en su cara, era su Tía preferida versus su prima rebelde.
-Jes, lo siento por lo que dijo tu mamá, no es verdad, yo esto lo hago con mucho gusto, no quiero que pienses que...
- No Lore, ella en algo tiene razón, siempre estoy molestando a los demás con mis cosas, esto debería hacerlo sola, pero no puedo, y lamento que tuvieras que presenciar eso que acaba de pasar, gracias por ayudarme y prometo que no te ocasionaré problemas, solo necesito tu firma en un par de papeles y ya está, no volveré a molestar, ni a ti ni a nadie.
- Pero a mi no...
- Déjalo Lore, todo esta bien, ahora vamonos que nos queda un largo viaje - dije cortando lo que ella iba a decir, porque sabia que muy en el fondo ésto era un problema para ella, aunque nunca me lo diría.
La universidad a la que iría estaba en otra cuidad a 1 hora de dónde vivían mis padres, así que nos quedaba un largo e incómodo viaje.
Universidad allá vamos.
▫▫▫
Mi nombre es Maria Jesús González Aedo, y todos saben cuánto odio mi nombre, sin ofender a nadie en lo absoluto, solo no me gusta, no sé qué estaban pensando mis padres cuando lo eligieron, tal vez estaban siendo presionados por la iglesia católica o algo así, no me lo explico, no son para nada religiosos y mucho menos yo, pero bueno, mi familia y amigos me llaman "Jes", un diminutivo de "Jesús", mi mejor amigo comenzó a llamarme así desde pequeños, ahora todo el mundo lo hace, y vaya que se lo agradezco.
Tengo 18 años, estoy a punto de comenzar la universidad, hace 6 meses perdí una persona muy importante en mi vida, y ya nada volvió a ser lo mismo, todo es un desastre, un caos, así que dicho ésto te doy la Bienvenida a mi vida, espero disfrutes tu estadía.
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My Disaster
Teen FictionQue pasa cuando todo se acaba, cuando pierdes una de las personas más importantes en tu vida, que es lo que sigue, como saberlo cuando perdiste las ganas de todo, las razones que tienes ya no son suficientes, dicen que la esperanza es lo último que...