Y es ahí, cuando tus pulmones estan artos de tener que oler inseguridad, cuando tu boca se niega a tener que seguir tragando mentiras, cuando tus huesos ya no pueden mantener ni un momento mas aquello que tu mismo creaste. Estas enfermo de la negligencia ajena debido a un amor que empezó muerto, tus manos estan temblando pidiendo salvación, tus pies quieren tierra segura, has volado tan alto que ya no recuerdas como fue que te enamoraste, aquí vamos de nuevo; sólos los corazones valientes se atreverían a hacer semejante barbaridad.