Domingo 29 de enero, hoy el Barcelona se enfrenta al Betis y yo voy tarde al partido, el metro se Sevilla está lleno.
Por suerte llego al estadio a tiempo, logró sentarme justo antes del pitido inicial y suspiro al hacerlo pero solo dura unos segundos pues me pongo de pie para disfrutar del encuentro.
Las cosas no van bien, para ninguno de los equipos.
Ni siquiera se en que minuto está el partido, y la gente grita demasiado, entonces Stegen se arriesga, decide jugar el balón en vez despejar pero lo pierde y tengo miedo, miedo por el equipo y miedo por él, y afortunadamente el disparo a portería va mas a las gradas que a las redes, festejo eso pero...¿porqué está en el suelo? Corro hacia su dirección pero no me dejan pasar. Los cuerpos médicos entran y lo atienden, los demás se acercan y Piqué pelea con alguien del equipo contrario. Cuando estoy dispuesta a seguir mas adelante para que le ocurre se levanta, voltea a mirarme y sonríe, es su sonrisa de todoestarábienpero se le nota triste y adolorido por el golpe.
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El partido continua y dejo de prestar mucha atención a los demás.
No transcurren muchos minutos cuando el dorsal 1 de Barcelona hace una atagada pero lo golpean de nuevo en la cabeza y esta vez no se pone de pie, pero sigue el partido y el parece estar bien. Tiro de esquina en contra y es gol, otro golpe, en el abdomen, esto ya es el colmo.
El partido termina con empate a uno.
Salgo corriendo a los vestidores y "Lucho" hace que me dejen pasar, espero fuera de los vestidores. Escucho voces y se que son ellos, su español no es el mejor y eso me causa risa.
ter-Stegen: ¿Qué haces aquí, liebe?
No salían las palabras de mi boca, de cierta manera se le veía demacrado, y el próximo mes sería peor.
Ter-Stegen: ¿Qué Pasa, Vi?
Vi: ¿Estás bien?
Ter-Stegen: si del partido hablamos, no, pero, estás aquí...¿porqué estás aquí?
Vi: terminé los trabajos pronto, el sábado por la tarde noche y ya tenía el boleto, entonces vine.
Rafinha: Agradecele Stegen, que debe hacer todo rápido por estar contigo.
Ivan: y mora que dos carreras.
Ter-Stegen: ¿a que viene eso?
Ivan: que parece que no te alegra que esté aquí.
Los chicos se alejaron y Marc me miró.
Ter-Stegen: no les creas, es solo que me sorprende, no tienes que presionarte con la escuela solo para verme, eso me hace sentir culpable y ya te dije que mantener la beca no es obligación, yo puedo pagarte la universidad.
Vi: no Marc, quiero hacer esto por mi cuenta, y EA bueno tener algo que me obligue a terminar las tareas pronto.
Llegué a casa Marc ya estaba en ella, pero igual iba llegando, y como de costumbre andaba descalzo por la casa.
Ter-Stegen: estaba por llamarte.
Vi: ¿quieres hablar del partido?
Ter-Stegen: si, pero que sea rápido.
Vi: lo será.
Ter-Stegen: ¿crees que fallé?
Vi: no, tu haces lo que puedes y eso lo deben apreciar, tanto en el Barça como en la selección.
Ter-Stegen: pero lo que puedo hacer tal vez no es suficiente para ellos.
Vi: lo que haces debe ser suficiente para ti, debe hacerte feliz, no te digo que te conformes, se que tratas de mejorar día con día pero eres humano y te equivocas.
Lo notaba triste.
Vi: y si me preguntan, esos golpes te des concentraron demasiado.
Él solo pudo reír.
Ter-Stegen: fueron dolorosos.
Vi: lo se.
Minutos mas tarde el estaba viendo el televisor, una película mientras yo leía, los dos en el sofá cama.
Ter-Stegen: deja ese libro y mejor sobas mi cabeza, que duele por los golpes.
Vi: terminé
Se recostó sobre mis piernas y empecé a acariciar su cabello, sin saber como es que está tan suave, aunque no duraría mucho, y reí por eso.
Ter-Stegen: también me pegaron en el abdomen.
Él seguía viendo la película su comentario fue inocente.
Vi: ahí te sobas tu.
El rió nervioso y suspiró.
Cuando terminó la película me disponía a ir a dormir pero Marc no se levantaba.
Vi: venga Marc, vamos a la cama.
Ter-Stegen: no quiero.
Y se durmió de nuevo, y no tuve de otra mas que acomodarme a su lado, por suerte la calefacción estaba puesta y teníamos los pijamas puestos, por suerte eramos los dos.
