Entre dos mundos

Capítulo 4

A las 10:00 llega Marcy. Ya me he duchado, he pedido pizza y he alquilado unas películas de terror. Ella traerá las bebidas.

Cuando Marcy llegue haremos juntas las palomitas. Admito que nunca me he llevado bien con la cocina, por eso necesito su ayuda.

Esperando a que llegue recojo mi cabello. Hace mucho calor, mi cabello es largo y está lleno de rulos.

- ¡Adiós Chloe! Cuídate. Me llamas cuando llega Marcy.- Dice mi madre.

- ¡Adiós mami! Te envío un mensaje.- Contesto.

Mi madre sale de mi casa con el auto, voy detrás de ella y cierro la puerta del garage.

Camino hacia mi habitación y me recuesto en mi cama junto con mi perrita Lele.

Estuve unos minutos acariciándola con mi mano izquierda y con el celular en la otra.

Suena el timbre y consecuentemente mi perra se altera.

Miro por la ventanilla y era Marcy.

- ¡Hola Marcy!- Digo, mientras Lele se abalanza sobre ella, en cuanto yo estoy cerrando la puerta.

Mi amiga con confianza ingresa a mí habitación y comenzamos a hablar de tonterías.

Ponemos música.

Luego de unos minutos las pizzas llegan.

Cenamos y nuevamente surge el tema: Chicos.

Le comenté a Marcy lo que había ocurrido el otro día con Matt, sin decirle que se trataba de él.

- ¿Sabes lo que significa eso, Chloe?- Dice con total seguridad.

- ¿No?- Digo confundida.

- ¡Que estás enamorada de ese chico! Por favor. Es demasiado obvio.- Afirma.

- ¡No lo sé! Apenas lo conozco.- Respondo.

- Pero.. ¿De quién se trata?- Pregunta.

- Mm.. ¿Qué tal si me cuentas qué pasó en el recreo el otro día?- Contesto, intentando evadir el tema.

- ¡Chloe! ¿Se lo vas a ocultar a tu mejor amiga? ¡Seguro Sarah lo sabe! O espera.. ¡Lo saben Cara y Sarah!- Reprocha.

Cara y Sarah son mis otras dos mejores amigas. Tenemos un grupo las cuatro y nos queremos mucho. Aunque a veces reciba escenas de celos por parte de Marcy.

- ¡Claro que no tonta! Ni siquiera saben que me gusta alguien.- Aclaro.

- ¿Entonces?- Dice con un gesto de desconfianza.

- Cuéntame lo que sucedió en mi ausencia en el recreo y al final decimos su nombre al mismo tiempo.- Propongo.

- Bueno. Me parece bien, acepto.- Afirma.

Marcy me contó que en el recreo, mientras bajaba las escaleras choco con un chico que la dejo boquiabierta.
Dice que el se disculpo y le pregunto si estaba bien. Fue muy amable, me cuenta.

Luego de eso bajaron juntos y se dirigieron a la cantina, donde se separaron. Él se fue con sus amigos.

- ¿Y bien?- Dice Marcy.

- Ok. A la cuenta de tres decimos sus nombres.- Contesto.

Contamos hasta tres en voz alta.

- ¡Matt Grimes!- Dijimos al mismo tiempo.

Ambas abrimos nuestros ojos y nos quedamos heladas.

- ¡¿QUE?!- Dijimos alunisono.