Muriendo por la espera de verte llegar

Capítulo 12

"No estás sola, queremos que recuerdes eso."

Las voces se oían un poco confusas.

"Tienes que ser valiente, aún hay muchas cosas que debes de saber. Te amamos,recuerdalo siempre."

Las voces cada ves se iban dispersando y se hacían bajas mientras seguía  caminando por el gran lugar azul en donde me encontraba, el ambiente se sentía como si estuviera debajo del agua,lo que impedia moverme rápido y allar la salida a ese largo camino.

Seguí avanzando y llegue a un punto en donde todo estaba oscuro. Lo único que pude diferenciar fueron unos grandes cuadrados que parecían ser ventanas, se encontraban en frente de mi,como si formarán una barrera y lo unico que quería era salir de esa sensación atrapante - pero sobretodo asfixiante - del agua por lo que decidí acercarme a lo que parecía una gran muralla de vidrio y atravesarla. Dispuesta a escapar de esta situación toque los ventanales y una luz resplandeciente surgió de ellos. Lo primero que pude ver fue a mis padres,arrodillados y con las miradas hacia abajo.

-Al fin los encuentro - dijo alguien en frente de ellos. Era un hombre pero su rostro y cuerpo se veían borrosos, incluso la mano abierta que apuntaba hacia mis padres- Ha pasado tanto,creo que por fin decidieron volver a sus raíces ¿No es así?.

-¿QUÉ ES LO QUE QUIERES?- soltó papá tratando de ponerse de pie.

-Nada solo he venido a saludar, ¿Su hija donde está?.

-Eso no es asunto tuyo- intervino mamá.

-Por supuesto que es mi asunto después de todo no podre volver a casa sin sus almas - en el rostro del hombre se dibujaba una gran sonrisa que reflejaba superioridad mientras se agachaba para poder agarrar fuerte a mi madre de la cabeza.

-¡DIME DONDE ESTA DE UNA MALDITA VEZ!

-No, no lo haremos, la tenemos que proteger hasta el final - dijeron mis padres juntos.

-Bueno ya que ustedes no quisieron ayudarme yo los ayudaré un poquito. ¿Hace frío verdad?- se levantó y retrocedió un poco- Sí,si hace frío así que habrá que calentar esto.

Giró su mano hacia la izquierda y el fuego se desató. El cuerpo de mis padres comenzó a arder en  llamas y la casa se les unió a los segundos, el hombre sale riendo de la casa y las pantallas se apagan de golpe.

-¿Morgan? ¡¿MORGAN?! ¡Responde! - la voz del profesor Claflin me devuelve a la realidad y  en ese preciso instante siento el aire invadir mis pulmones mejorando así mi pesada respiración. Abrí los ojos de golpe. Me encontraba en la clase de física.

-Los vi....- solté lentamente,sentía las palabras atascadas en mi garganta- No fue un accidente, no lo fue. Ellos...,él.... ¡NO FUE UN ACCIDENTE!

Mi respiración comenzaba a agitarse más y más, al mismo tiempo en el que una ira desconocida empezaba a adentrarse en mi.

-Morgan cálmate por favor - el profesor Claflin intentó acercarse.

-Necesito salir de aquí - creo que lo dije tan bajo que nadie logro escucharme. La desesperación estaba a segundos de volverme loca , las imágenes de mis padres se repetían una y otra vez en mis ojos, sus gritos , sus miradas y sus cuerpos ardiendo.

-Morgan, necesito que te levantes poco a poco y salgas de la clase por favor - todo lo que dijo el profesor se quedo en la nada ya que en su primera palabra salí del salón hecha una furia.

Los pasillos estaban vacíos como de costumbre así que tenia toda la libertad para moverme. Mi visión estaba nublada pero no por lágrimas sino por rabia , rabia de saber que alguien arrebató mi felicidad a propósito.

Seguí caminando hasta llegar al campo de entrenamiento y una ves ahí corrí para llegar a lo más profundo del pequeño bosque y poder refugiarme dentro de lo único que consideraba familiar en ese lugar.

Un árbol muy grande se erguía frente a mi cuyas raíces y ramas imponentes me hacían sentir protegida y no tan sola; sus hojas grandes de un tono verde casi perfecto daban una sensación relajante muy parecida a la paz y  todo el amor que mis padres reflejaban en su mirada. La misma mirada con la que se que ellos me veían y con la que me enseñaron a amar cada cosa viva en este mundo.