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Luna se veía hermosa con su vestuario para la competencia.

Y lo fue aún más cuando patinó, bailó y cantó junto a su su amigo, obteniendo una muy alta calificación.

En verdad Luna ha mejorado mucho desde que llegó a la pista, y lo enorgullece por ello.

Él y Ámbar estuvieron fantásticos igual, pero a pesar de ello, sólo lograron colocarse dos puntos abajo de Gastón y Luna.

Así que ellos dos serían los titulares de la siguiente fase, y Matteo y Ámbar los suplentes.

"¡Esto ha sido tu culpa!" Le reclama su novia en cuanto anuncian los resultados. "¡Si tan sólo te hubieses concentrado más y asistido a los ensayos!"

"Ámbar, tranquilízate" intenta calmarla. "Al menos alcanzamos el puesto de suplentes, deberías estar agradecida de que fuímos seleccionados."

Ámbar alza los brazos al aire, frustrada.

"¿Ahora eres un conformista?" Inquiere irónica. "¿Sabes qué? Me cansé de ti y tu cambio de actitudes. Si no estás dispuesto a volver a ser el mismo Matteo de antes, creo que no podremos seguir con esto."

Matteo enarca una ceja.

"¿Estás terminando conmigo?"

"A menos de que vuelvas a ser el mismo de antes, si."

Él bufa mientras se despeina el cabello.

"¿Cómo quieres que logre algo?" Exclama dolido. "Este soy yo, siempre lo fui."

Ámbar sonríe nostálgica, y con una mano le acaricia el rostro.

"Ambos sabemos que eso no es cierto." Dice, y luego se va lejos.

Todo ha terminado.

Bacalar; Matteo BalsanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora