Hasta el instante en que
Siguió el instinto de su corazón.
Y se dirigió a la cocina,
Con sigilo y desesperación.
Aunque nadie la escuchara,
Temía que su sombra se despierte.
Hasta el instante en que
Siguió el instinto de su corazón.
Y se dirigió a la cocina,
Con sigilo y desesperación.
Aunque nadie la escuchara,
Temía que su sombra se despierte.