Living Together -Terminado-(editado)

Capitulo 3

Reglas 

Serena se fue, no sin antes de que conversamos un largo rato, no me dijo nada sobre el comportamiento de los chicos asi que me alivié.

Después de que cerré la puerta me dirigí a los chicos mirándolos seriamente. Todos dejaron de ver televisión para mirarme.

— ¿Porqué nos miras asi?—dijo Harry en tono asustado.

— ¿Que es eso de andar desnudo por la casa? —enarqué una ceja. Él se sonrojo y dió una risita.

— ¡Ves, eres un tonto! —se quejó Zayn.

— ¿Y eso de ser egoísta por un acondicionador? —le dije ahora a él.

—Oh vamos, es de un estilista profesional y... —lo interrumpen.

—Eres un inmaduro. —le dijo Louis.

— ¡Cierto! —le apoyó Harry.

— ¡No! —gritó Zayn— ¡Y dejá de usar mi acondicionador de una vez!

— ¡Basta! —dije elevando la voz y todos me miraron. — Esta casa necesita orden.

—Concuerdo contigo ______. —dijo Liam a mi lado.

—Yo igual. —dijo Niall sentado en el brazo del sofá.

—No quiero ser la mala, pero pienso que si queremos tener una buena relación debemos respetar ¿no? —Todos asintieron— Harry, no tocarás más el acondicionador de Zayn si él no te da permiso ¿okey?

— ¡Ahí tienes! —dijo Zayn con sonrisa de ganador.

—Y tú... —subiendo el tono de voz— No harás más actos egoístas, debes aprender a compartir.

—Pero... Está bien. —rodó los ojos.

—Ah y eso de salir desnudo por la casa, no quiero que se repita. —le adverti a Harry. — ¿Que pensarían si yo ando desnuda por la casa como si nada? —pregunté y todos levantaron las cejas.

— ¿Realmente quieres saber que pensaríamos de eso? —preguntó Zayn con una mírada pícara.

—Mejor no contesten. —Les dije frunciendo el ceño. — Pero enserio, Harry basta de andar desnudo por doquier.

—Si mamá... —dijo en tono de niño. Todos rieron.

— ¿Con los demás no hay problemas verdad? —dije mirando a Niall, Louis y Liam.

—No. —dijeron los tres con una sonrisa.

—Aprendan de ellos. —dije chocándoles los 5.

Luego Louis comenzó a cocinar, él era un buen chef según los chicos.

— ¡Niall basta! —se quejó.

—Solo quiero tomar un pedacito. —pidió él.

— ¡No! Me has estado diciendo lo mismo como veinte veces, luego no habrá para la cena.

Decidí evitar esa conversación y fui a mi habitación, prendí la notebook y leí unos mails.

¿Un mail de Zac? Lo abrí confundida.

{Me enteré que te has mudado con un grupo de chicos... ¿Estás demente? Sí que eres rápida. ¿Con cuantos de ellos te has acostado hasta ahora? Ya, solo mandaba el mail para decirte que vengas a buscar a tu gato, está destrozando la casa. Si no vienes mañana, lo tiraré por ahi. }

Cerré la notebook enfadada, Zac es un idiota. Si solo quería decirme lo del gato porque no lo dijo y listo, pero no, tenía que incluir sus comentarios.

— ¿Pasa algo? —me preguntó Liam, apoyado sobre el marco de la puerta.

—Mmm, no. —decidí por decir.

—Puedes confiar en mí. —se acercó sonriendo y se sentó a mi lado.

Esa era una de las características que me gustaban de él, que era muy atento.

—Bien, mira... —le mostré el mail.

—Me huele a resentido. —haciendo una mueca, solo reí.

— ¡Losé! Además, ¿como va a preguntarme si me acosté con alguno? ¿Que clase de chica piensa que soy?

—se rió—Olvidalo. ¿Quieres que te acompañe mañana a buscar al gato? —rió nuevamente.

—Si no debes hacer nada, ven. —sonreí.

—Okey, solo recuerda avisarme. Con los chicos terminaré por olvidarme.

—Si descuida.