No Me Llames Amor. {HISTORIA CORTA}

Tercer Capitulo.

Alice se había quedado en mi casa para alistarnos juntas. Los chicos pasaban a la 2 y eran la 1:57

Yo estaba lista por lo contrario Ali no.

Sonó el timbre.

-Llegaron. -le dije a Alice.

-Aún me falta Eli.

Entonces fui a abrir.

-Hola Ryan, hola Tom. -les di un abrazo. Steven iba a manejar. Ya todos estabamos en la buseta menos Alice, ella seguía adentro.

-Está chica que piensa que tenemos todo el dia. -dijo Will fastidiado.

-De hecho tenemos todo el día, la noche y mañana. -dijo Sebas sarcastico.

-Te callas sí? -dijo Will molesto.

10 min después al fin llego Alice a la buseta.

Los campos erán de 3 en 3

Adelante iba Steven manejando, Ali y Tomás.

Luego Anny, Keith y Sebas.

Y atrás Yo, Ryan y Will.

Arrancamos y Will de una se durmió.

Yo iba acostada al hombro de Ryan ambos escuchabamos música pero diferentes. Ryan estaba apunto de dormirse.

Mientras dormía le miraba, se veía tan bien. Hace tanto tiempo no había sentido esto por alguien y la verdad me daba miento a terminar lastimada de nuevo, me estaba enamorando mucho.

Eran dos horas de viaje.

Se pasaron muy rápidas en realidad.

-Llegamooos. Gritaron los de adelante por lo que hicieron que todos se despertaran.

Estacionamos, llevamos todas nuestras cosas a la arena hechas un puñito y salieron corriendo todos hacía la playa.

Ryan y yo nos quedamos viendo la playa.

Luego me abrazó por atrás. Lo que fue muy tierno.

Y me dijo.

-Sabes Eli desde que te vi me enamoré de ti me encantas, eres diferente a las demás y eso es lo que más me gusta de ti. Llevo poco de conocerte pero es suficiente para saber qué eres la persona con la qué quiero estar, la chica más perfecta que hay.

Me giró hacía el frente de él y tomo mis mano, lo cuál me dieron muchos nervios y me puse helada.

-Elizabeth Reyes, te gustaría ser mi novia?

Me quede en shock. Por unos segundos y luego reaccione.

-Claro qué sí. -dije con una sonrisa y lo abracé.

Él me tomó de la cintura y me besó.

-Te quiero tanto linda. -sonrió.

-Sabés que yo más. -le devolví la sonrisa.