Capítulo XXXIV

13.7K 730 51
                                    

Capítulo XXXIV

Mire el reloj, las tres de la mañana, me levante, contra mi voluntad. Tenían que alimentar a mi pequeño, me puse las pantuflas y salí a la cocina. Metí el biberón al microondas, tres minutos después caminé hasta la cuna de Leo, lo tomé en brazos y le di de comer.

“Tenías hambre, mi pequeño glotón” sonreí al ver como se tomaba su leche como si su vida dependiera de él.

Leo ya tenía seis meses y más hermoso no.podrían estar. Comenzaba a mostrar carácter y al parecer sería el de Camila. Un bebé sumamente calmado, comía, hacía lo p sus necesidades, jugaba un poco y dormía, básicamente la vida soñada de toda persona.

Una vez que Leonardo se terminó su comida, lo puse a repetir y después se quedó dormido, como dije, él estaba teniendo la vida que yo quería tener en aquel punto de mi vida.

No me quejaba, me encantaba tener dos hijos y una esposa, lo amaba, pero había veces en que las cosas se ponían intensas y más con Celine, quien había heredado el carácter de los Jaureguis.

Y es que, si mi pequeña princesa quería la barbie más reciente en el mercado, Mamá Lauren se la compraba, si la nena quería un helado antes de comer, se lo conseguía, si mamá Camila la castigaba, mamá Lauren le daba lo que mi esposa le quitaba. Y esto me estaba dando muchos problemas con Camila.

Pero es que era mi princesa y no podía decirle que no.

**

Camine hasta la sala de estar en donde Camila estaba sentada con Leo entre sus brazos, me acerque hasta ella y trate de darle un beso, pero ella giró la cara y el beso quedó en la mejilla.

Suspiré y me senté junto a ella, tomando a mi hijo entre los brazos, sonreí al ver aquel cabello castaño y los ojos enmielados con destellos verdes.

“¿Donde está Celine?” Pregunté cuidadosa

“En su recamara, y antes de que vayas y le quites el castigo, por qué en efecto, está castigada. Quiero que sepas que esta no está funcionando, yo no puedo jugar tu juego y el de ella, no puedo ser la mamá mala y tú la buena porque yo soy la que me quedo con ella las 24 horas del día, Lauren. Tú solo estás unas horas entre semana y en los fines de semana, dejas que haga lo que ella quiere” me dijo exaltada y asentí

“¿Qué hizo ahora?” Mi esposa suspiro

“Me contestó mal, peleó con uno de sus compañeros y me hizo un berrinche en el centro comercial” comentó agotada. Asentí, bese su frente y le dejé a Leo en los brazos, para encaminarme hasta la recamara de mi hija.

“Lauren, necesito que por una vez seas la mamá que le llama la atención y no celebra este tipo de comportamiento” me dijo

“Está bien” ella me miró

“Lo digo en serio, este comportamiento ya no me está gustando y si no haces nada tú, lo haré yo.” Asentí

Comencé a caminar hasta el cuarto de Celine, pensando en que Camila tenía razón, no podía yo quitarle poder a Camila, por mucho que quisiera a mi hija, tenía que comenzar a poner límites para evitar enfrentamientos con Camila en un futuro cercano.

“Mami” gritó mi pequeña al verme, se abrazo a mi cuello y comenzó a llenarme el rostro de besos.

“Necesito hablar contigo, enana” entre cerró los ojos y se cruzó de brazos

“Mami, mejor llévame a tomar un helado y así hablamos” negué y la senté en la cama

“ Estás castigada. Dime qué pasó” bufo y me miró

“Dylan me quitó mi lonchera y yo le he pegado en sus partes” relato Celine y aunque apenas tenía seis años, comenzaba a resaltar su personalidad testaruda y cabezota de los Jaureguis.

“Bien, te he dicho que monte dejes pero la violencia nunca es la solución, ¿lo sabes, verdad?” Ella asintió “La violencia solo trae más violencia”

“Si, lo sé. Pero me dio mucho coraje” asentí

“¿Que ha pasado con mamá?” Inmediatamente bajo su mirada

“Mami…” negué

“Cuéntamelo por favor…” suspiro

“Le he contestado mal y le he gritado en el super porque no me quiso comprar los chocolates que tú siempre me traes…” termino de decir

“Sabes por qué lo hizo, ¿verdad?” Me miró

“Porque estoy castigada, pero tú siempre me las compras aún cuando estoy castigada” suspiré

“Celine, te amo y quiero darte lo mejor, pero no voy a tolerar esta actitud que tienes con tu madre. Camila te ama, es tu mamá y todo lo que ella hace, es para que tú seas una buena niña y dentro de unos años, una buena ciudadana” la mire “Los padres no somos perfectos y cometemos muchos errores, mi error contigo es darte todo aún cuando sé que no te lo mereces por tu comportamiento.” Bajo la mirada

“Lo siento…” la abrace

“Eso debes de decírselo a tu mamá, ¿entendido?” Ella asintió

“Te quiero, mucho…”

**
Vi a Celine caminar hasta donde estaba Camila con Leo. Sigilosamente, la pequeña se sentó junto a su madre y la abrazo fuerte.

"Lo siento, mamá. Te prometo que ya me voy a portar bien" le dijo besándole las mejillas repetidamente

"Mi vida, te amo con todo mi corazón. Y si te castigo nones por que no te quiero, sino por que quiero que seas una niña bien portada y que no vayas por el mundo haciendo cosas que te puedan afectar" ella asintió

"Mami me lo ha dicho y ella también va a cambiar así como yo" Camila me miro y eleve los hombros sonriendo.

Camine hasta ellas tomando a Leo en los brazos llenándolo de besos, así como a Celine y a Camila.

Minutos después, nuestra hija comenzaba a jugar con su pequeña hermano.mienttas ambas los veíamos. Desvíe mi mirada a Camila quien me estaba mirando.

"Gracias por entender, Lauren" negué

"No, gracias a ti por hacerme ver que estaba haciendo mal" la abrace a mi cuerpo y le bese la cabeza "Voy a cometer  muchos errores, Camz. Y me tienes que tener paciencia" mi esposa acarició mis mejillas para después darme un beso delicado en los labios, saboreando su gloss, sintiendo la carne de sus labios entre mis dientes y el sabor de su lengua en mi boca.

"Te amo, Lauren. Y con gusto estaré para hacerte ver tus errores y los corrijan, así como se que tú estarás para hacerme ver los míos..."

Sonreí " Tú eres perfecta, nunca cometes errores"

"Mami" Celine escalo hasta quedar entre mis brazos besando mi cara para después hacer lo mismo con Camila, quien ya tenía a Leo entre sus brazos.

Y es que no había familia perfecta, todos comeríamos errores pero por eso éramos una familia, para salir adelante , apoyarnos en todo y sobretodo, querernos como solo nosotros sabemos.

Y no seríamos la familia perfecta, pero estando así, los cuatro, no estábamos.muy lejos de serlo.

shameless (camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora