Sin retorno

CULPA

Por lo general le gustaba la oscuridad de la ciudad, el silencio que esta obtenía al ocultarse el sol, como si los seres humanos desaparecieran y ya no fueran la raza predominante en la tierra, la soledad que se sentía al caminar por las amplias calles, sin llegar a sentir intranquilidad, protegido, sin temor al futuro

Eso era la noche para el

O bueno, eso era antes

Ahora lo que alguna vez fue tranquilidad se convirtió en desesperación, la soledad solo daba paso a esa consciencia demoledora que no dudaba en atacarlo a la menor oportunidad, reprochándole todas sus acciones, todo el daño causado y como esta etapa de su vida no estaba ni cerca de terminar.

Lo peor de todo, es que él podía seguir con su vida, fingir que nada paso o que él no tenía la más mínima culpa y alejarse, con el tiempo estos momentos se convertirían en simples recuerdos sin remordimientos, podría hacerlo si quisiera, pero la verdad es que no podía

No podía aunque todo su cuerpo exclamaba retirada

Había algo que le impedía irse

No era su familia, no eran sus amigos, ni siquiera eran Kise y Aomine

Era él aquella persona que le abrió los ojos sin siquiera saberlo aquella persona que le hizo ver la monstruosidad que había hecho si tan solo hubiera aparecido antes en su vida nada de esto hubiera pasado.

-Oi! Kuroko! – Kagami había llegado en su moto, vestía una camisa blanca y unos pantalones negros, todo perfectamente acoplado a su cuerpo – Sube rápido! Me estoy congelando.

-Buenas noches, Kagami kun – Le dedico una sonrisa al pelirrojo, este solo soltó un bufido y puso en marcha su motocicleta, habían sido múltiples las veces en las que había tenido que recoger a Kuroko de la entrada de un club, le había preguntado múltiples veces que hacía frecuentando tantos en este último año, sin embargo Kuroko nunca había soltado ni una sola palabra al respecto, completamente resignado con el tema, se dedicaba a llevar al Peli celeste sano y salvo a su hogar

En medio del camino Kuroko se preguntaba el que pasaría ¿Qué pasaría si Kagami kun se enteraba de todo el daño que había causado por sus creencias? Que actualmente podía decir que eran una estupidez

Era ridículo decir que un antiguo homofóbico se había enamorado de alguien de su mismo sexo

Comenzó a recordar las amenazas, burlas, desprecios que dirigía a Kise, los golpes accidentales que le infligía en los partidos de básquet, todo aquello porque creía que Kise era el causante de que su mejor amigo, se convirtiera en un sucio homosexual.

-Kurokochi? No quieres salir a dar una vuelta? Será divertido!

-No quiero salir Kise kun me incomoda estar cerca de ti

-Eres malo Kurokochi! Estás enojado? Si es así no te molesto más! Te llamare mañana cuando estés más calmado

-No quiero que me llames más Kise kun, no quiero alejarme de mi camino

-Deberías practicar tus bromas Kurokochi, ese humor negro no lo entienden muchos ¡Suerte que yo si! Hasta luego!

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-Aomine kun vamos a jugar básquet?

-No puedo Tetsu, hoy tengo una cita con Kise

-Una cita?

-Sí, me la ha estado pidiendo desde hace un rato y le cumpliré el capricho

-Aomine kun las salidas con amigos son diferentes a las citas, no deberías decir eso con tanta soltura, la gente lo toma de otra manera