Lo mejor que me ha pasado fuiste tú

Te quiero en mi vida

Este fic es un regalo para mi amigo secreto Gabs Pimptrickster, por el evento de Valentino Slash II, es Cherik, y es el primero fic de esta pareja que hago, quería poner un guiño a NightAngel, pero como no conozco también a los personajes no supe como meterlos, aun asi enserio espero que te guste y lo disfrutes.

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En el Ajedrez, como en la vida, la mejor jugada es siempre la que se realiza. (Dr. S.Tarrasch, Clásico del Ajedrez)

Erik lo habia decidido, lo haría porque Erik Lensherr no es ningún cobarde.-Erik- una voz lo saco de sus pensamientos.- ¿En qué piensas querido, que estas tan distraído?

-En nada, ¿qué paso?-Charles sonrió, a veces su novio se enfrascaba tanto en sus pensamientos, que era casi imposible traerlo de regreso.

-Te toca hacer tu movimiento- Charles apunto a tablero de ajedrez frente a ellos, Erik miro el tablero y luego hacia Charles que lo veía sonriendo ajeno a los pensamientos del mayor, y Erik sonrió también, en definitiva, Erik ya tenía planeada su mejor jugada, y olvidando por un momento el juego, puso en marcha su plan.- ¿Estas libre este sábado Charles?

-Supongo que sí, ¿algo planeado?- "No tienes ni idea"

La tarde de ese sábado era hermosamente perfecta, la brisa era fresca y el cielo empezaba poco a poco a teñirse de tonos cálidos, como si todo se hubiera puesto de parte de parte del chico que empujaba a su novio para que caminara a ciegas por una banqueta.

-Erik, ¿A dónde vamos?- un joven castaño con los ojos cubiertos por un trozo de tela, era guiado por un de mayor estatura, que sonreía mientras caminaban.

-Tranquilo Charles, ya casi llegamos- el mayor tuvo que inmovilizar las manos del más bajo para que no se quitara la venda, caminaron lo que al castaño le parecieron kilómetros, hasta que el mayor detuvo el paso.-hemos llegado.

Erik le quito la venda a Charles admiro la expresión del castaño, la cara del mas bajito era de pura sorpresa, sus ojos brillaban y sus mejillas tenían un leve coloreado carmesí.- Erik, no entiendo- Charles volteo a ver Erik buscando alguna explicación acerca de la escena frente a él, Erik solo le devolvió una sonrisa y le tendió la mano, el castaño no se hiso esperar, se dejó guiar por Erik de nuevo.

Frente a ellos se cernía llena de luces, música y risas una pequeña feria local, Charles se sentía tan feliz que era incapaz de ocultarlo, su sonrisa se ensanchaba tanto que llego a pensar que su rostro se entumecería, y es que el nunca habia estado en una feria grande o pequeña, su madre no solía ni dejarlo salir al jardín menos iba a permitirle ir a una feria, y con el paso del tiempo el deseo se fue perdiendo así como muchos sueños que guardaba consigo de niño, ya era un adulto no tenía tiempo para eso, volteo a ver a su novio, Erik lo miraba con una sonrisa tímida completamente perdido en su expresión, Charles no pudo contenerse y poniéndose de puntitas le dio un pequeño beso a Erik, en definitiva tenia al mejor novio del mundo, a veces se preguntaba que habia hecho para merecerlo, Erik se sobresaltó levemente por el beso del castaño y desvió la mirada totalmente avergonzado, en definitiva Erik era un regalo que no merecía.

Erik miro de reojo como se reía Charles, se sentía tan bien escucharlo, Charles era sus ojos el hombre más hermoso del mundo y su risa la melodía más bella, creada por Dios, cuando la escuchaba Erik sabía que estaba jodido, porque estaba consiente que haría cualquier cosa por seguir escuchándola, todo en Charles lo dominaba, aun no sabía a qué fuerza divina debía dar gracias de que el castaño haya aceptado ser su pareja, pero, debía hacerle un altar, pues Charles lo mejor que le habia pasado en la vida, por eso estaba dispuesto a demostrarle al castaño cuanto lo amaba.

-Erik, ¿Por qué me has traído a la feria?- el castaño no lo estaba viendo, estaba atento a todo a su alrededor, intentando guardar una imagen mental del momento.

-Ya lo veras, ven conmigo quiero que pruebes algo- Erik llevo a Charles a través de la feria, deteniéndose en varios puestos, Erik sabía que era la primera vez de Charles en una feria y quería que la disfrutara tanto como pudiera, no quería que olvidara esa noche, en todo su recorrido solo soltaron sus manos cuando participaban en alguno de los juegos de la feria, anduvieron un largo rato, Charles fascinado con el lugar y Erik fascinado con las expresiones de Charles, se detuvieron en un puesto de tiro, y Erik probó su habilidad al ganar para Charles un tiburón de peluche.- ¿estás seguro que quieres ese?.

-Claro, me recuerda a ti.- Erik solo suspiro y le dio gracias al joven que atendía el puesto, siguieron con su recorrido, el cielo ya habia perdido sus cálidos tonos naranja, y ahora un manto oscuro lleno de estrellas ocupaba su lugar.- ¿Ahora a dónde vamos?

El celular de Erik sonó, el mayor leyó el mensaje y sonrió.- Deberíamos subirnos a un juego.

-¿A cuál?

-La rueda de la fortuna.- el rostro del más bajo perdió color, y es que Charles tenía un miedo enorme a las alturas.- Esta bien Charles estoy contigo.- Erik aumento la presión en la mano que sostenía la del castaño, Charles trago en seco, y asintió, Erik planeaba algo él lo sabía, y su curiosidad parecía poder más que su miedo.

Charles se sostenía con fuerza de las orillas de la canasta del juego.- tranquilo Charles, nada te pasare estoy contigo.- Charles sonrió y relajo un poco la presión de su agarre, muy poco, porque por mucho que confié en su novio, años de miedo no desaparecen en una noche, el juego comienzo a andar y Charles soltó un gritito femenino, cosa que negara toda su vida, mientras las canastas se mecían levemente, Charles cerro los ojos, cuando llegaron a la cima el juego se detuvo un poco brusco, suficiente para que Charles se diera otro quejido y se abrazara todo lo que podía a Erik.

-Charles abre los ojos- Erik tocaba levemente al castaño intentando separarlo un poco, mientras Charles negaba con la cabeza enterrada en el hombro del mayor.- Charles, por favor abre los ojos, confía en mi.- Charles se separa aun con los ojos cerrados y muy levemente los fue abriendo, y se encontró con la bella sonrisa de Erik, y la devolvió como reflejos, Erik apunto con su dedo hacia el suelo, y entonces Charles dejo de respirar.

En el suelo varias personas, entre las que distinguió a su hermana Raven al novio de ella Azazel, así como su primo Hank y demás amigos y familiares que sostenían en alto unas pancartas, Charles comenzó a llorar, las pancartas decían con letras grandes y claras:

CHARLES XAVIER, ¿TE CASARÍAS CONMIGO?

Erik a su lado miraba al lado contrario, Charles tomo su rostro entre sus manos y lo obligo a mirarle, le sonrió, en su rostro aun presente las lágrimas.- Si Erik, me casare contigo- lo beso, esperando transmitirle con ese gesto a Erik todo el amor que en ese momento sentía por él.

Abajo sus amigos y familia, gritaban de júbilo y se abrazaban con emoción, al fin esos dos darían el siguiente paso, mientras tanto Erik y Charles pensaban mientras se besaban, "en definitiva, no sé qué hice bien para que me ames"