Peter Parker || Tom Holland - One Shots

-changed

Tres años. Tres años habían pasado desde la última vez que ví a Peter Parker, mi mejor amigo. O ex-mejor amigo. Tres años desde que estoy saliendo con Harry Osborn, el mejor amigo de Peter.

Miles y miles de cosas suelen cambiar a diario, pero lo que hacían tres años era incomparable.

Hoy, sábado por la noche, volvería a ver a Peter Parker, a mi pequeño nerd. Harry había organizado una pequeña reunión en nuestra mansión luego de tres años de ver a nuestros compañeros de curso luego de nuestra graduación. Mis viejas amigas estarían allí, Liz Allen y Mary Jane Watson. Faltaría Gwen pero la pobre rubia sufrió un accidente luego de la muerte de su padre, no se sabe mucho de su causa de muerte, pero lo que es seguro, es que nos hace mucha falta.

El reloj marcaba las 7:35pm, la gente empezaría a llegar a las 8pm pero de igual manera yo ya estaba lista desde hacía ya 15 minutos. Estaba emocionada por ver a Peter, mi primer amor y el amor de mi vida.

Si, tenia un crush en mi mejor amigo desde la primera vez que se conocieron, pero él siempre estuvo interesado en tus otras tres amigas, y hasta estuvo en una relación con Gwen antes de su accidente. Nadie en el mundo, excepto por mi madre, sabía que estaba enamorada de Parker, esa es la razón por la cual no me enojaba con Gwen por salir con Peter. Ellas solo no sabían, como el resto del mundo.

La puerta de la habitación se abrió, mientras me observaba en el espejo de cuerpo completo, mostrando a un Harry muy confundido con respecto a su corbata.

"Tres años enseñándote como poder atarla y todavía no aprendes" hablé mientras me acercaba a él con una sonrisa.

"Claro que he aprendido, solo que disfruto verme como un tonto mientras tú lo haces" dijo con un notable sarcasmo. Reí acomodándosela.

"Ahí está, amor"

"Gracias, eres la mejor" besó mi mejilla, "¿estas lista?"

"Si, lo estoy" respondí con una sonrisa. "Por cierto, está muy guapo esta noche, señor Osborn." comenté jugando.

"Usted no se queda atrás, señorita t/a." Sonrió de oreja a oreja, mientras seguía el juego.

Le tomé la mano y caminamos hasta bajar las escaleras y encontrarnos en la sala de la bella mansión que el padre de Harry había conseguido hace un año para nosotros dos. Era un poco deprimente ya que Harry siempre iba a "trabajar" y yo quedaba sola, con algunas señoras de limpieza, hasta altas horas de la noche. No quería desconfiar de Haz, ya que sé que él nunca me haría eso, pero últimamente se estaba tornando raro y los regresos a casa en la madrugada se hacían muy frecuentes.

Sacudí mi cabeza tratando de no pensar en eso, éste era un día especial y no quería arruinar eso.

El timbre sonó, me acerqué a abrir la puerta y ahí se encontraban Michelle y Ned, viejos amigos de Peter.

"Juro que no llegamos juntos, yo no vendría con este perdedor" dijo Michelle refiriéndose a Ned y pasando por mi lado sin si quiera mirarme. Quedé perpleja.

"La chica sigue siendo igual de rara que antes" dije mirando por donde se había ido.

Ned encogió los hombros "En realidad, llevamos saliendo unas semanas" Lo miré espantada, ¿como dejaba que lo trate así? "Descuida, no es así todo el tiempo" rió y paso para dirigirse directamente hacia la mesa llena de comida. Típico.

El reloj de la sala marcaba las 9:13pm, la música estaba fuerte y se podía escuchar a Mary Jane cantando arriba de una silla de la sala. Sonreí, esa chica sí que había cambiado, parece que las clases de actuación la habían ayudado a combatir su timidez.