de

76 6 0
                                    

Escaneo la primera nota, la que trajo la carta, para pasarla al ordenador y verificarla esta vez con mis amigos. Mis padres no muestran nuevas expectativas sobre el paradero de Jaime, ni tampoco modifican sus relatos en la muerte de mi amigo. Así que esta vez recurro, a mis actuales amigos. Espero que no me tomen por loco.

- Mándanos lo que tengamos que ver. – Me dice Juan por chat -.

- Quiero que lo leáis atentamente ya que es poco legible y podéis confundir algunos términos. – Les digo serenamente -.

- A mi todavía no me ha llegado. – Me dice Natalia también por el chat -.

- Creo que ya está. – Le confirmo a Natalia -.

- Vale.

Pasan unos minutos infernales que hacen que me reconcoma por dentro.

- ¿Qué tal vais chicos?. – Pregunto que para comprobar que en verdad lo están leyendo -.

- Y, ¿qué quieres que leamos?. – Pregunta Juan -.

- La carta, es el papel que os he pasado.

- ¿Te refieres a la redacción?. – Pregunta esta vez Natalia -.

- ¿Lo tomas como una redacción de primaria?.

- Bueno, yo veo que es una hoja escrita por un tal Jaime, y que narra una historia que no alcanzo a entender. Este chico tiene una letra horrible. – Narra Natalia -.

- En ella... – Les doy una pista por si no saben entender el texto con claridad -. Jaime me está diciendo que sobrevivió al accidente de tren de hace siete años y que hasta ahora yo tenía certeza de que realmente estaba muerto. Me está guiando a pistas para poder reunirme con él de una forma... digamos clandestina.

- No... no. – Juan entra en el dialogo -. Yo coincido con Natalia, por la letra desfigurada y por los continuos manchones, creo que es una actividad del colegio. Te diría más, pero es que no se entiende.

- Yo si la entiendo, porque me acostumbré a ver su letra desde pequeño. Pone eso, creedme.

- No te lo voy a negar. – Dice Natalia -. Pero, ¿entonces crees que tu amigo sigue vivo?.

- Esa nota me muestra la posición de una pista. Fui ayer donde me indica el papel y efectivamente la pista estaba ahí. Una nota dentro de una botella, tal y como pone en el papel.

- Eso suena un poco peliagudo. – Dice Juan -. Te aconsejo que si es verdad, lo dejes. Porque a saber... alguien desconocido habrá encontrado ese papel y te lo habrá enviado años después de escribirse.

- Sí, la letra tiene toda la pinta de ser la de un niño. – Dice Natalia -. Y además, dijiste que la carta, es decir, el sobre estaba escrito a bolígrafo.

- ¿Has verificado que el sobre y el papel lo han escrito la misma persona?. – Dice Juan -.

- Si, os lo puedo pasar si queréis.

- No sé como el cartero habrá acertado con la dirección, esa letra es ilegible.

- Yo la letra de Jaime la entiendo perfectamente. Y os digo que pone eso.

- Estas muy seguro de eso. – Dice Natalia -. Creo que las "pistas" te están confundiendo.

- Fui a por la segunda pista, la encontré, la leí y me guiaba a otra pista diferente. Completamente real.

- ¿Y por qué no nos enseñas esa segunda pista, si puede saberse?

- Por que... Jaime me obligó a dejarla ahí.

Papermoon (Luna de Papel)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora