Sobre musas y canciones

42 2 1
                                    

Esta es la historia de Adrian; Adrian no es un hombre rico o afortunado, él sólo es un músico como cualquier otro, que pretende ganarse la vida con su música aunque no sea capaz de escribir una sola canción sino tiene una musa para la cual componer y eso es una total desventaja, porque la musa turno se ha escapado de él y ahora sólo tiene una canción a medias y la cabeza llena de dudas.

La musa se llama Esperanza y Adrian no podría llamarla de otra manera, desde que llego a su vida fue como un rayo de luz en su camino.

Caminaba agobiado por una de las concurridas calles en el centro de la ciudad, había sido rechazado en siete entrevistas de trabajo de siete a las que se había presentado y se dirigía hacía la octava.

Adrian no era un hombre pesimista pero sus anteriores y tan recientes experiencias lo hacían predisponerse al fracaso, tenía la seguridad de que aquella iba a salir tan mal como todas las anteriores, que nada ganaba con fingir un profundo interés por aquel empleo; consistía en atender llamadas ofreciendo ayuda a los clientes de una conocida compañía telefónica, nada del otro mundo, en realidad estaba por debajo de sus expectativas, pero a esas alturas poco le importaba de que se tratará, sólo necesitaba un trabajo urgente.

Al entrar a las oficinas le indicaron una puerta, en donde estaría la persona que lo entrevistaría; entro refunfuñando con una sola cosa en mente: Sáquenme de aquí.

Pero al entrar la vio a ella, sonriendo amablemente, no con la hipocresía que le habían demostrado los demás gañanes en sus anteriores entrevistas, no, esa sonrisa era real, o quizá no lo era y sólo él lo imaginaba, porque necesitaba que fuera real.

Automáticamente su actitud paso de "Sáquenme de aquí" a un radical "Voy conseguir este empleo".

Esperanza parecía tan feliz que Adrian se preguntaba cada cierto tiempo el por qué; ¿tan devota era a su trabajo o era así todo el tiempo?, ¿le habría pasado algo bueno esa mañana?, ¿habría visto a alguien que la mantuviera tan alegre?, y con algo de optimismo: ¿podría ser él ese alguien?

Al terminar la entrevista se despidieron formalmente. Todo lo que sabía de ella era su nombre y, evidentemente, el lugar en donde trabajaba. Había sido sólo una coincidencia y esa bien habría podido ser su última oportunidad de verla, aún así no le pidió una cita, ni siquiera su número de teléfono. Prefería pensar que el destino se encargaría de planificar su encuentro, que el universo conspirará a su favor y consiguiera aquel trabajo.

Por obra del destino, o del buen perfil de Adrian, obtuvo el empleo. Ella misma lo recibió en su primer día de trabajo y esta vez no le dejaría nada más al destino, la invito a salir después de su turno y después de semanas sin poder escribir un estrofa decente escribió una canción, un himno a la esperanza, notas que sólo podían surgir cuando ella ocupaba sus pensamientos.

Con el tiempo comenzaron a salir, Adrian sentía que nunca había sido tan feliz, todo iba bien entre ellos, ni siquiera habían tenido una verdadera discusión desde que se conocieron, quizá fue por eso que le sorprendió la repentina decisión de Esperanza.

—Tal vez sería mejor si... dejáramos de vernos—titubeó con la mirada perdida en la nada, como si tuviera miedo a que Adrian se dedicará a buscar su mirada y terminará por encontrar algo desagradable, aún más que sus palabras.

Adrian no pudo decir nada, estaba demasiado desconcertado y Esperanza, al ver que no preguntaría un por qué agrego sin más:— Quiero pedirte un favor.

Existía cierto miedo en ella, miedo a que se negará, no tenía derecho a exigirle nada en realidad, pero conocía a Adrian lo suficiente como para esperar que accediera.— Quiero que renuncies—miro hacia arriba buscando sus ojos, aquel silencio la lastimaba más que las palabras a él—. No tienes porque hacerlo, sé que necesitas el trabajo, puedo renunciar yo—intentó suavizar sus palabras con cierta torpeza apresurada, sin darse cuenta de que aquello sólo lo volvía más doloroso.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 26, 2014 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Sobre musas y cancionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora