III

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Ya era viernes y de nuevo nos encontrábamos viendo el cadáver de la cuarta víctima de la semana; se nos había ido uno de los testigos, el mismo chico que logro ver el rostro del asesino. Por mas seguridad que pusimos logro matarlo sin que nadie se diera cuenta.

El cuerpo de WooHyun se encontraba abierto, podía ver cada órgano dentro de él, todos destruidos. Todos rodeábamos el cuerpo para observar cómo se encontraba, sus ojos no estaban y sus dedos habían sido cortados, tenía algunas quemaduras presentes en el cuerpo.

- Hemos perdido al último testigo –respondió frustrado HoWon.

Los forenses se llevaron al cadáver mientras que yo me dedicaba a analizar la escena. Comencé a mirar las huellas marcadas con sangre alrededor del cuerpo, los órganos esparcidos por el piso. Las huellas parecían ser de un zapato militar talla 41, los órganos cortados tenían la misma marca que los otros cuerpos, según el forense la arma homicida era una katana.

- Oficial Myung Soo –llamo EunJi- mire esto

Me acerque a EunJi para ver qué era lo que sostenía en sus manos, era un papel. Tome el objeto para abrirla encontrándome con otra carta, Jack había dejado otra nota.

"Aquellos que son y serán mis victimas merecen sufrir para luego vivir el infierno al que pertenecen"

- Estaba en la garganta de la víctima, el asesino debió dejarla ahí para que la encontraran al momento de hacer la autopsia –deducción.

- No dejare que mate a alguien más. Este asesino me saca de quicio y hoy será su ultimo día cometiendo crímenes.

Furioso tome dirección a mi auto, comenzaría mi plan para atrapar a este asesino serial. Atrás mío, caminaba EunJi cuyo rostro solo mostraba una sonrisa y HoWon parecía estar preocupado.

- ¿Cual es su plan oficial Myung Soo?

- Hare que el venga a mi –sonreí emocionado.

(...)

Eran la 23:47 pm y ya llevaba 7 copas de ron, me encontraba estable, no estaba ebrio pero necesitaba mantenerme consiente para atrapar al asesino a mi alrededor se encontraban dos oficiales encubiertos. Según datos que se descubrieron en la investigación, Jack esperaba a victimas que se les veía por última vez a las 12 de la noche, ahí era cuando las mataba.

Trate de disimular como miraba mi hora llevando el vaso con ron a mi boca, aun faltaba para poder salir del club. Camine al baño para lavarme el rostro, estaba un tanto cansado así que iría a refrescarme para despertar. El baño estaba vacio así que solo fui al lava manos y refregué mi cara con la fría agua que salía de la llave. Me sentía observado mientras me miraba en el espejo, sentía la presencia de alguien pero por más que miraba a través del espejo no encontraba nada. Mi mirada se dirigió a la puerta al ver algo extraño, ahí logre encontrar una mirada, la misma mirada penetrante y llena de odio que habia dibujado el forense. No perdí tiempo y salí del baño pero ya no había nadie.

- Maldición –golpee la pared, lo había perdido, de seguro ahora no lo podría encontrar.

Observe a la gente bailar y entre ellas una personas con un sombrero sonreía en mi dirección, su sonrisa era de diversión, como si esto fuera un juego. Tras algunos segundos lo vi caminar por entremedio de la gente, no dude en seguirlo, esta era la única oportunidad que tendría. Ya habíamos salido del club, el llevaba una cuadra cuando entro a un callejón, era el mismo callejón en el que habían matado a DongWoo.

Trague saliva para luego avisar por radio que tenía a Jack y que no se movieran hasta mi señal. Sin esperar más avance para dirigirme al callejón, trate de no hacer mucho ruido mientras caminaba de manera lenta al lugar, miraba a mi alrededor por si había alguien pero no vi nada.

Una fuerte punzada en mi pierna me hizo caer al piso, el liquido rojo salía de una herida que había sido provocada por un corte bastante profundo.

- Te estaba esperando –se escucho una voz desde la oscuridad.

- Será mejor que te prepares, esta será tu última noche en las calles

- Pero que idiota –se rio- debes pensar bien lo que dices, podría devolverte

En un movimiento rápido vi como su katana desprendía mi brazo, el dolor me inundo, mis ojos llenos de lágrimas pero tuve que guardar silencio cuando el se acerco

- Esta vez será distinto, te matare sin hacerte sufrir solo por el hecho de que quisiste arriesgar tu vida para atraparme –sonrió, su sonrisa me resulto conocida, sentía que ya la había visto antes. Se volvió a mover de manera ágil para enterrar el arma en mi pecho, justo en mi costado- tranquilo, no sufrirás tanto antes de desangrarte –comenzó a rasgar mi herida con su katana. Trate de tomar mi radio para lograr contactar a los demás pero antes de que pudiera hacer algo, el asesino lo había tomado.

- ¿Qué harás? ¿entregarte? –pregunte tratando de aguantar el dolor que provocaba cada vez que rasgaba mi herida.

- No –encendió el radio- oficial caído, repito, tenemos a un oficial herido –sonrió.

- ¿Qué planeas?

- Quiero que encuentren tu cadáver y que tengas un bonito velorio

Mis ojos ya comenzaban a cerrarse, apenas podía mantener mis parpados abiertos. El piso se encontraba cubierto por mi sangre, me desangraba con rapidez y el dolor era insoportable que apenas pudiera pronunciar palabras.

- Quiero ver tu rostro. Si voy a morir al menos déjame saber cuál fue el criminal al cual no pude detener –pedí tratando de mantener los ojos abiertos.

Una sonrisa se formo en su rostro, vi como se saco la bufanda de manera lenta. Mis ojos ya no daban mas, por suerte ya se había sacado la bufanda que cubrían su rostro, solo faltaba que se volteara para que viera su rostro. Se saco el gorro dejando libre su largo cabello, quede sorprendido.

- Fue un placer trabajar para usted, Oficial Myung Soo –sonrió.  

Jack el DestripadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora