Bob Esponja "El Sexy Animal" y Tú | One Shot

El Animal más Sexy de todos.

Estaba yo caminando como siempre debajo del mar y acababa de venir de una fiesta en la mansión elegante de Arenita. Vine de pelear con ella. Cómo la odio >:(

Yo estaba bailando como siempre debajo del mar y de pronto la estúpida ardilla acuática absorbe planctones me golpea furiosa porque soy bonita y ella es tonta.

El novio al verla, la dejó y se quedó soltera. Tonta, se lo buscó.
Luego él llegó donde mí, como siempre debajo del mar para pedirme matrimonio. Y le dije: No. Tu pene ya tocó la vagina de Arenita, no gracias.

Es verdad, wey. No tendré enfermedades raras. Never, iux.

De pronto, empiezo a llorar como siempre, debajo del mar y al secarme las lágrimas que salen, mi cara impacta sexymente contra algo musculoso.

—Ay... —gemí. No saben lo sexy que se sintió.

—Hola, bebé —habló la estúpida y sensual voz de...

¿Bob Esponja?

¡Ay, santo cielo! Bob Esponja es el chico más sexy del océano. Sus músculos, su voz tan caliente que te derrite, sus dientes perfectos, su nariz puntiaguda y exitante me ruboriza.

—Vamos a mi casa debajo del mar hoy —atrae mi cuerpo contra el suyo, como todo un animal salvaje, oh—. Mejor ya.

—Pero...

—¡Te dije que ya!

Ay, me encanta cuando se pone macho. Es tan animal que me pone, uh.

Me llevó hasta su casa y dejé mis libros sobre el sofá que se encuentra, como siempre, debajo del mar. Él puso música romántica y me miró con deseo y pasión. Entrecerró sus ojos, y me lanzó contra el mostrador de su cocina. Sabía lo que venía, no me podía resistir.

¿Pero, en la cocina? Really nigga? No importa. Nunca me gustó que mi primera vez fuera en una cama. Es aburrido lo usual. Yo quiero sentirme única y diferente esta vez, debajo del mar.

—Prepárate para quedar sin fuerzas por el resto de tu vida —me guiña un ojo logrando calentar mi cuerpo. Siento palpitaciones por todos lados, ya no aguanto.

—¡Sólo hazme tuya, estúpida esponja!

Y me golpeó en la mejilla, como ya saben, debajo del mar. No le gustó que le dijera estúpida esponja. No puedo creer que dije eso. Ofendí a quien más deseo en la vida. Debo aceptar mi castigo por ser tan desobediente.

—Castigame, ya, por favor. —lloré.

Entonces Bob el animal que vive debajo del mar, buscó su cinturón de cuero, y me quitó la ropa, dejándome expuesta ante sus ojos. Tan solo que me mirara ya sentía todo. Sus golpes en mis pechos, mi trasero... Qué rico.

—Ahora, te haré sufrir como me gusta —dijo y sonreí. Por fin seré suya, aunque sea debajo del mar.

Rompió sus pantalones de un solo, y me agarró sentándome sobre el mostrador, y luego grité de dolor. ¡FUE ESPANTOSO!

—¡AAAAAAAAAAAAAAAAAH! ¡OH, BOB!

—¡GRITA, QUIERO OIRTE!

—AAAAAAAAAAAAAAAAAAH —obedecí llorando. De pronto, abro los ojos y veo su enorme pene lleno de mi sangre. Entonces el dolor se convirtió en excitación y él empezó a darme cual cajón que no cierra y tratan de meterlo miles de veces hasta que encaje.

Saltaba yo sobre él debajo del mar, y me lastimaba cada vez que bajaba. Esa esponja tan sexy y animal me dejó noqueada a los segundos, y sentí el cielo. Vi colores, vi el paraíso. Entonces supe que morí, en los brazos de mi poseedor.

No me importó haber muerto por el dolor. Bob esponja, el sexy animal, fue la primera y única esponja macho en mi vida. Pude morir en paz, luego de tener sexo salvaje con esa esponja amarilla y musculosamente orgásmica cuya casa es una perfecta piña... debajo del mar.

Fin❤