CHEATED ─ YOONMIN

siete;

Tengo que verte, ¿estás ocupado?

No, dime dónde

Voy a tu casa, llego en media hora

Bien, te espero ❤

Fue a lavarse la cara al baño, sus ojos rojos y cristalizados no iban a desaparecer y ni siquiera intentó disimularlo. Caminó hasta la entrada, tomando su campera negra del perchero y unos anteojos de sol y salió gritando un «Iré a casa de Seongwon»; por lo que Yoongi, que estaba en la sala mirando a Taehyung y Jungkook jugar, levantó su cabeza de repente.

Jimin caminaba lentamente con la mirada fija en el piso. ¿Qué estaba pasándole y por qué tan rápido? No lo sabía y no estaba seguro de querer averiguarlo. Hace unas semanas las cosas iban muy bien, tenía un novio al que quería mucho y unos amigos con los que se sentía muy bien; ahora tenía a un novio que supuestamente estaba engañándolo y a un amigo tratando de que terminara con él, mientras los demás chicos no tocaban el tema.

Sin darse cuenta ya estaba en la casa de Seongwon. Tocó el timbre y espero con las manos en los bolsillos, hasta que se abrió la puerta.

—Hola, Jiminnie. —Seongwon lo hizo pasar y le dio un pequeño beso en los labios.

—Hola. —contestó en tono neutro, sacándose los antojos y sentándose junto a su novio en el sillón de la sala.

—Traeré galletas.

Seongwon no logró pararse del sillón ya que Jimin lo tomó del brazo y lo miró a los ojos por primera vez desde que llegó.

—Necesito que hablemos, es serio.
Seongwon se preocupó al ver sus ojos y tomó las manos de su novio.

—¿Qué pasa? ¿Ocurrió algo malo? ¿Estabas llorando?

¿Por qué tenía que hacerlo tan difícil? Verlo de esa manera hacía que quisiera golpear a Yoongi. Jimin esperaba que lo que le había dicho fuera mentira, pero a la vez no quería que lo fuese, no quería enojarse con él por eso, y sabía que sería inevitable estar bien con ambos.

—Esto es muy complicado para mí, y difícil de decirte.

—Espera, ¿vas a dejarme? —Seongwon no tenía expresión alguna en el rostro.

—Sólo necesito respuestas. ¿Me estás engañando, o lo hiciste? —preguntó tratando de contener la lágrimas.

—¿Qué? No, ¿por qué lo dices?

—Won, en serio, te pido que me digas la verdad.

—Te lo juro. —Le dolía cada palabra. ¿Acaso Yoongi le había mentido?

—Won, me dijeron que estabas en el centro comercial con una chica... Y que la besaste.

—Jimin, es todo muy confuso, no es lo que parece.

El nudo que Jimin tenía en la garganta crecía cada vez más, Seongwon lo miraba con un aire desesperado. Parecía que el único idiota en esa situación era él, lo sentía de esa manera. Nada de lo que estaba pasando le gustaba.

—Necesito que me expliques que pasó. —Seongwon asintió y fijó su vista en sus manos.