4

1.8K 91 5
                                    

El mayor aparcó su camioneta en una bonita casa de dos pisos, se encuentra ubicada en una de las mejores zonas de la ciudad. Nuevamente me ayudo a bajar y entramos a la bonita casa.

—Bienvenida a mi...— Un chillido no le dejó terminar la oración.

—¡Menudo idiota!— Una mujer bajista, algo regordeta, blanca y de ojos marrones hizo aparición en la sala—¡¿Como se te ocurre traer a una visita y no avisarme, Agustín Bernasconi?! — La mujer le dio un zape en la cabeza y yo mordi mi labio inferior para no reir.

—¡Mama!— El oji marrón se quejó y se acarició la cabeza —¡Yo te dije!

—Oh— La mujer se sonrojó y dirigió su mirada hacia mi— Hola cariño— Me extendió la mano— Soy Clara, pero puedes decirme Clari.

—Caro— Tome su mano y nos dimos un apreton— Un gusto.

La señora Clari se acercó a mí y me tomó de las mejillas.

Raro...

—Aw— La mujer me sonrió — Eres tan bonita— Vio a su hijo— Es muy joven, Ariel— Le vio algo seria.

—¡No me digas así!— Él cruzó los brazos sobre su pecho.

—¡Yo te llamo como me dé la gana!— La mujer le vio con el ceño fruncido.

No pude contenerme y reí por la cómica situación. Ambos me miraron  sonrojados.

Son tan parecidos...

Almorzamos los tres juntos en la enorme mesa del comedor. Luego de eso Clari me mostró todo el álbum de fotos de Agus, desde pequeño hasta la actualidad.

Simplemente... Hermoso.

Vi a el oji marrón por el rabillo del ojo, lo único que hacia era ver su celular sonrojado hasta las orejas. Vi tantas fotos inclusive vi repetidas. La mujer nos dejó por un momento, fue a atender una llamada. Me concentre en ver unas fotos que estaban en los estantes y hubo una que me llamo la atención.

Estaba mi tío, sus amigos y Agus en una iglesia viendo a la cámara. Los amigos de mi tío y este tenían en su smoking una flor blanca, mientras que el oji marrón tenía una flor roja.

¿Él es casado?

Si lo es... Lo mato.

—Ariel— Lo llamé por su segundo nombre y este se tensó — ¿Eres casado?

—Yo...—Él se levanto del sillón y se acercó a mi. Miró la foto y luego miró mi rostro serio. Carraspeo— No, soy divorciado.

—¿Hijos?

—Nop— Me sonrió — Me separe de Sofia hace un año y medio. Resultó ser mas zorra que Lori de The Walking Dead.

Intenté sonreír, pero me salio una mueca. El oji marrón me tomo de las mejillas y comenzó a acariciarlas con sus pulgares.

—Solo me interesas tú y te lo voy a probar.

Vi como poco a poco comenzaba a acercar su rostro al mio y sus suaves labios se juntaron con los mios. Besó dulcemente mis labios, bajó sus manos a mis caderas y yo rodeé su cuello con mis brazos.

Nuestros labios se movían en un suave vaivén, adentré mis manos en su suave cabellera negra y comencé a darle uno que otro tirón. Tuve el placer de escucharle gruñir cada vez que hacia eso. Sus dulces y expertas manos acariciaban mi espalda y mis manos.

Ambos nos separamos por desicion propia, sentía como mis mejillas ardían y le vi. Con su boca ligeramente abierta, con respiración entrecortada, sus mejillas rojas y y sus ojos tan brillantes se encontraban dilatados.

—¿Ves, Caro?— Esta vez depositó un beso sobre mi frente— Soy tuyo.

Mierda...

Esas palabras...

Demonios, creo que estoy enamorada de ti.

El Mejor Amigo De Mi Tio: Me Gusta (Book) (Aguslina) [ADAPTADA] [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora