Parte 65 : Reconciliación ...

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<Christian>

Salimos en el auto en camino para Bellevue, ahí viven mis padres. Es la nueva casa que compraron apenas vinieron a mudarse definitivamente a Seattle, en Milan era sofocante para ellos tener que acostumbrarse a vivir en un edificio. Pero esta casa parece ser que tiene una de las mejores vistas a las aguas de Sound. 

Ana  y yo estamos nerviosos por la reacción de mi padre, no porque me importe sino porque no quiero que lastima a Ana con palabras hirientes que hagan que renuncie a mi o a la vida que tenemos en conjunto.

Ana insistió que venga María y su hijo ya que forman parte de la  pequeña familia que somos allá en Italia. María se negaba pero se dejo ir cuando se entero que eran órdenes de mi madre para querer agradecerle por lo que hace por Ana y por mi. 

Ana y yo como siempre con Taylor al frente manejando, viste de un hermoso vestido azul zafiro como sus preciosos ojos. Esta impecable y se muestra perdida en la ventana, le beso de a poco los nudillos y me sonríe, a duras penas veo la luz de la luna que le ilumina medio rostro, parece una mascara por la mitad en su rostro. 

-Que pasa cariño ? - me dice dulce con su voz melodiosa.

-Un dolar por tus pensamientos - se ríe natural y me enamora mas.

-Serías pobre con todo lo que pienso! - me río por lo bajo. 

-Prefiero serlo a que otro ocupe tus pensamientos - la beso largo. 

-No tienes remedio Christian ! - niega riendo leve. 

- Contigo no hay remedio que me pare, por qué crees que vivo enamorado ? - le levanto una ceja irónico.

-No se, sera que esta algo enfermo de celos ? o porque es un maníaco del control ? - se burla de mi y atraigo la mano para morderle el meñique.

-Es por ti nena - sonríe sincera y me acaricia la mejilla - no estés nerviosa apenas creas que te sientas incómoda nos iremos - le digo y asiente en silencio no dice mas y decido no hablar hasta que lleguemos. 

Si hablo de mas puede que la pueda poner mas nerviosa de lo que esta. 

Llegamos a la entrada con las puertas gigantes de madera lustrada, ni yo había visto la casa a la que se mudaron, debe tener unas 4 o 5 hectáreas y una finca por lo que se. Es gigante la casa y cálida, no me molestaría que en un futuro mis hijos vengan a pasar el verano con sus abuelos. 

-Ana, Christian !!!!! - mi madre abre la puerta anticipando nuestra llegada - Como los extrañe !! hijo ... - esta por caer en el llanto y ruego por dentro que no lo haga. 

-Madre, yo también te he extrañado - le digo cuando me abraza fuerte como si hubiera vuelto en años.

Mira a Ana y se emociona mas de verla sana, no cree verla como esta ahora parada, sana y radiante. Ana la mira y siento que ella también romperá en llanto.

-Ana ... hija, por dios ! estas viva y radiante ! - se apresura a abrazarla y Ana hace lo mismo, me dedica una mirada llena de emoción, la miro igual y mi madre no puede dejar de abrazarla.

-Señora Grey, como ha estado ...  la hemos extrañado demasiado - se miran mutuamente y se limpian las lagrimas corridas. 

Me acerco a tomar a Ana por la cintura mi madre me mira casi pidiendo con la mirada que la deje respirar un poco. 

-Christian deja que disfrute de Ana verla feliz y mas viva que nunca ! - Ana suelta una risita y yo sonrío como estúpido. 

-Madre !! estas dejando de lado a María y  a Luca su hijo - los busca con la mirada a los dos detrás mío, están algo inhibidos de estar en un país que no conocen.

Two Loves  - One Lover ...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora