Único.

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Era un chico desviado, sin familia ni nada que lo mantuviera con los pies en la tierra. Kim Taehyung tenía dieciocho años cuando lo arresté por primera vez. No fue nada demasiado grave, sólo le robó el bolso a una señora gorda y podrida en dinero. Luego de eso, sus palabras calaron hondo en mí y es que ¿Qué clase de chico de su edad tiene esa clase de pensamientos?.

—No pude evitar notar su nombre, oficial Jung Hoseok, se me hace conocido. ¿Será tal vez porque es hijo del dueño de una empresa millonaria? Entonces digame, ¿No debería estar su padre tras las rejas? Sólo es una sugerencia. Estoy seguro de que su padre se ha hecho con el dinero de varias personas, estafandolas. ¿Estoy en lo cierto? ¿No es eso lo que hacen los empresarios? Se aprovechan de la gente humilde, sólo para generar más y más ceros en sus cuentas bancarias. Entonces ¿Quién es el ladrón; el que roba para poder comer, o el que roba para aumentar sus ganancias?

¿Cómo un chico tan pequeño pensaba así las cosas? Aunque tuve que admitir que tenía razón.

Como no tenía antecedentes, el bolso fue devuelto y nadie salió herido, lo dejamos unas horas en una celda y luego salió.

Esa fue la primera vez que nos visitó, varias le siguieron, siempre por distintas razones. Si no era un robo menor, era por usar drogas o pelear con alguien.

Debo admitir que le tomé cariño al pequeño vándalo, era casi como una hermano menor. Aunque creo que él no me veía de la misma forma y lo confirmé cuando nos vimos aquella vez.

Era de noche y no tenía demasiadas ganas de cocinar, así que resignado me dirigí a comer a algún lado. Entré con la alegría que me caracterizaba a la pizzería y ahí lo vi, con ese ridículo uniforme verde y azul, el pelo medianamente peinado y una mueca de aburrimiento total.

—Bienvenido ¿Qué desea ordenar?— Habló sin despegar la vista de la pequeña televisión colgada en la pared.

—¿Que tal que dejes de meterte en problemas, niño?— Sus labios rosados formaron una mueca automáticamente al verme.

—No se meta donde no lo llaman, oficial Jung.

Acerqué mi mano a su cabello y los acaricié con ternura. Sus mejillas se tornaron rojas al instante, cautivandome. Desvió la vista y tomó una lapicera y un bloc de notas.

—Solo quiero una pizza de queso.— Vi cómo lo anotó rápidamente y frunció el ceño para dirigirse nuevamente a mí.

—Puede esperarla sentado en una mesa.

Asentí conforme y me senté en una mesa que quedaba cerca del mostrador para seguir mirándolo. Cada tanto observaba el reloj y suspiraba.

La pizza llegó a la media hora y con ella, vi salir a Taehyung a la calle. Tomé la caja, dejé propina y lo seguí.

—¡Taehyung!— Grité cuando lo vi subirse a una moto.— Ven a comer conmigo.

Se sacó el casco y me miró serio.

—¿Hablas en serio?— Asentí.— ¿Qué esperas? Sube imbécil.

Con algo de desconfianza y miedo subí tratando de no soltar la pizza y, tampoco caerme por el camino. A penas me aseguré, la moto arrancó.

—¿A dónde vamos?— Pregunté al no reconocer el barrio.

—A mi casa. Dudo que quiera darme su dirección, ¿Verdad?

Su casa, era un departamento destartalado y más viejo que mi mejor amigo, Yoongi. A penas tenía una mesa con dos sillas y un sofá, mugroso, en la sala.

Esa noche pasaron muchas cosas que no esperé, como que la pizza supiera tan bien desde los labios de otra persona, que la mamá de Taehyung había muerto asesinada por su padre, y que ese pequeño era insaciable.

Tuvimos sexo hasta caer agotados en aquella cama con los resortes salidos.

Supe que él era más de lo que dejaba ver y, que me gustaría reparar cada fragmento de su roto corazón. También, supe que iba a hacerlo la persona más feliz del universo si él me dejara.

Pero no me dejó.

A la mañana siguiente ya no estaba.

Y no volví a verlo.

Ya no iba a verlo en la estación, no iba a arrestarlo y menos a probar sus dulces labios.

Era como si nunca hubiera existido.

Todavía tengo la esperanza de algún día encontrarlo, para poder curar con besos y caricias cada pedazo de su ser.

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Me gusta tanto escribir cosas así. A veces me siento una perra, pero después digo "Yo lo escribo" y se me pasa 😂

Bye~

Belén

De Policías y ladrones •Vhope•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora