En la habitación de hotel.

Capítulo único

Los personajes de Yuri!!! On Ice no me pertenecen.

Sexo explícito. Una de las partes está alcoholizada.

Habrá un corazón roto e infidelidad.

Relación chico x chico.

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El grand prix final que acababa de pasar era especial, porque era el primero en toda su carrera sin Viktor Nikiforov, su rival ruso y colega, quien se había retirado el año pasado a sus 29 años de edad. Una carrera inusualmente larga para un patinador artístico, pero nada sorprendente tratándose de la llamada leyenda viva del patinaje. Él no lo envidiaba por eso. No por los incontables títulos que había obtenido, ni por su fama o dinero... sino por haber obtenido sin esfuerzo al amor de su vida.

Lamentablemente para él, Viktor se había ganado a Yuuri Katsuki de manera justa, aunque irónicamente él se había fijado en el muchacho japonés primero. Pero era un niño, uno caprichoso y de personalidad terrible, que poco sabía del amor y de como proceder... claro que perdería ante un adulto experimentado como Nikiforov. No fue hasta que cumplió los 17 que juntó el valor para confesarse. Yuuri lo rechazó amablemente, algo incómodo y angustiado, porque lo había tomado completamente por sorpresa. 

Viktor y Yuuri estaban comprometidos, lo sabía, no esperaba una respuesta afirmativa. Solo que ya no lo tratara como un niño, que no le contara sus problemas con Viktor, porque no quería saber y lo hería cuando lo hacía. Pero, pasado un tiempo, Yuuri volvió a ser como era antes. Se dio cuenta que quería hacer como si nada hubiese pasado, o que realmente, para el otro nada había pasado. Sintió que sus sentimientos fueron menospreciados, y que él era considerado un simple mocoso a los ojos de la persona que amaba.

Que cruel eres Yuuri.

Eso pensó cuando el japonés le ofreció que compartieran habitación en el hotel donde se hospedarían mientras competían en el GPF. Estuvo a punto de gritarle que era un imbécil, y que se metiera su ofrecimiento en el culo. Pero así como abrió la boca la cerró. En cambio terminó diciendo que le parecía bien.

¿Es que acaso no se daba cuenta que ya no era un niño? ¿acaso se había olvidado que él era la persona que quería? Tenía 18 años y era incluso más alto que Yuuri, aunque un poco más bajo que Viktor. Sus facciones se habían endurecido también, aunque su complexión siguió siendo delgada, los hombros se le habían ensanchado perceptiblemente.

Debía admitir que el dormir con la persona que le gustaba en la misma habitación, aunque fuese en camas separadas, lo emocionaba. Verlo levantarse despeinado, compartir la rutina matutina y la de antes de acostarse, conocer sus mañas -como que dormía con antifaz y tomaba un vaso de agua al levantarse-, todo eso lo consideraba valioso. Nunca había pasado tanto tiempo con él sin Viktor revoloteando alrededor. Se permitió fantasear con la idea de que así serían sus días si hubiesen sido una pareja, y que quizá sin el destacado patinador hubiese tenido una oportunidad.

No pretendía nada más que construir recuerdos para atesorarlos. Nunca se imaginó que entre esos recuerdos, también iba encontrarse el de haberse acostado con Yuuri.

El ganador del oro del GPF se había retirado unos veinte minutos antes que él del banquete que se celebraba como siempre al final de la competencia. Chris se encargó de llevarlo a su habitación, ya que se hospedaban en el mismo hotel y también se iba. El japonés había tomado demasiado, dejándose llevar por los demás patinadores, quienes querían verlo de nuevo en acción. Le decían que por haber ganado el oro por segunda vez consecutiva debía festejar como es debido, y Yuuri, que estaba tan alegre, accedió. Hizo estragos como aquella vez, en la que había tenido la oportunidad de bailar junto a él en esa ridícula competencia de baile.