Cap.4

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Volví a casa, deje las llaves sobre la mesa. Estaba cansada. Subí despacio la escalera hasta mi habitación para dejarme caer en la cama, antes había revisado mi celular pero no tenía ningún mensaje, en ese momento me quedé dormida.
Me despertó algo vibrando en mi mano, mire la hora y eran las 2 am. Como había dormido! Me fuí de hora.
Nuevamente la burbuja de chat apareció.
Leo: Salís?
Yo: No no, y vos?
Tardó unos minutos
Leo:Capaz vaya con unos amigos nomas, pero no se, tengo sueño.
Yo: Ahh y sí esta bien -le puse
Después pensé más y me convenía saber quienes eran algunos de sus amigos, entonces le puse
Yo:Con quiénes te juntas?
Leo: Somos muchos, pero mis mejores amigos son Dani y Matt
No respondí pero estaba leyendo, los busqué medio dormida en instagram y los encontré, no iba a seguirlos porque iba a quedar muy obvia... o no? Bueno no importa, al final los seguí.
Leo: Los ubicas? -me puso un rato después q no contestaba
Yo: Mmm.. no creo
Leo:Uhh bueno

Bloqueé mi celular, y me quede pensando que raras eran las conversaciones con ese chico. Me volví a dormir, esta vez me levante a las 12.30.

Me estiré para reventar todos mis huesos tensos, y me froté la cara.
Marta ya tenía preparada la comida, porque los lunes y los miercoles almorzabamos solas. Eran los días que más me gustaban porque Marta se lucía con la comida.
-Marta esto está exquisito-dije con un ñoqui en la boca
-Me alegro que te guste hace mucho no haciamos ñoquis -respondió limpiandose la boca con una servilleta
-Si tenes razón -estaba con un tenedor en la mano-como 7 meses
-Exagerada -rió
Terminamos de comer y lleve las cosas a la cocina para que Marta las pudiera lavar. Fuí a mi habitación y prendí la televisión, capaz podía mirar un rato mi serie, prendí en aire y me tapé.
Agarré mi celular, y no, no tenia ningun mensaje de Leo, sólo mis amigas diciendo nuevamente para vernos, lo cuál ignoré por completo.
-Temporada 5 ya! - me dije a mi misma- vamos bien
Empecé a mirarla atentamente, y terminé el capítulo, cada uno duraba al rededor de 40 y 45 minutos, así que me mantenía entretenida.
Me puse de costado antes de mirar el tercer capítulo que miraría hoy y cerré los ojos porque era la hora de la siesta y, una vez que comí y miré mi serie daba por finalizadas mis actividades.

Nunca Nos VimosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora