Capitulo 4

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Tenia un nudo en la garganta, sentía como me abrasaban los ojos, las lagrimas estaban apunto de salir.

Me sentía feliz y a la vez triste. Era una sensación tan abrumadora.

Todas mis cosas estaban como las dejé, el ambiente de la casa era el mismo y todo olía como siempre. Como había echado de menos todo esto, mi hogar.

Habia vuelto a casa.

Despues de pasar tres largos años en Nueva York, promocionando y

vendiendo mis libros decidí volver.

Pensé que tomarme un año sabático seria lo mejor.

No podía seguir mas tiempo allí, el estrés de todo el trabajo me había empezdo a agobiar tanto estos últimos años ya no había sido capaz de soportarlo, el estar de un sito para otro y el no tener tiempo para ti misma había terminado por superarme.

Pensé que me iría solo por tres meses y que volvería a Inglaterra y todo volvería a ser como siempre, pero lamentablemente las cosas no habían sido así.

En vez de tres meses habían sido tres años, tres largos años sin ver a la gente que quiero y sientiendome al margen de todo y de todos.

Pensé que cumplir mi sueño seria diferente, yo solamente pretendía que la gente conociese mi talento y apreciase lo que hacia. Pero acabe perdiéndome completamente.

Había ganado tanto dinero en estos 3 años, demasiado. Y es verdad que el dinero te cambia y lo hace totalmente, sin que te des cuenta, un dia te despiertas y te das cuenta que todo ha cambiado, que tu has cambiado.

Y eso me había pasado a mi, el estar sola tanto tiempo y que todo el mundo me obligase a escribir y no tener una amiga con la que hablar me habían echo refugiarme en la bebida, esa había sido mi única amiga durante 2 años.

El primer año todo había sido perfecto, ni siquiera me había dado cuenta de que llevaba allí mas de tres meses, todo el mundo me adoraba y me quería, les gustaba lo que hacia. Hasta que empezaron a pedirme mas y mas, y no me importaba, me gustaba, eso significaba que yo les gustaba. Pero después todo cambió, había terminado agobiandome, todo lo que hacia era de trabajo, no hacia nada por que yo quería, me sentía obligada a hacerlo y cuando eso empezó a pasar empecé a perderme a mi misma. Empecé a beber, a salir de fiesta todo el tiempo, no hacia caso a la editorial que me había dado el trabajo que deseaba y así mi vida y mi trabaja empezó a decaer.

En los periódicos y revistas todo el mundo hablaba de la joven y alocada escritora. Era toda un celebrity, todo el mundo queria saber que me estaba pasando que habia pasado con la pequeña e inocente Anneliese Sheridan y porque se habia vuelto tan loca y rebelde.

Bueno supongo que había sido el estrés, el estar sola y ser demasiado joven para ganar tanto dinero, no se como los estúpidos cantantes pop con los que tanto había sido relacionada, podían tener tanto dinero, mucho mas del que yo tenia y que no se les fuese la olla.

Y es que hace 2 meses que había salido de un centro de desintoxicación, vale supongo que no tomaba solo alcohol, puede que se me fuese la mano y tomase alguna que otra cosilla pero todo había quedado atrás, esta totalmente limpia. Había vuelto a ser la que era antes y eso me gustaba, había vuelto para recuperar mi vida.

Estaba sentada en el sofá de la sala mirando una foto en la que salíamos Grace y yo, al instante volvió a parecer un nudo en mi garganta y esta vez no retuve mis lagrimas dejé que salieran en cascada y se derramasen sobre la foto.

Me preguntaba que habría sido de mi gran amiga, si seguía viviendo a dos calles de aquí, si seguía siendo pelirroja y si querría seguir siendo mi amiga aunque claro ¿Cómo iba a querer ser mi amiga otra vez? ¡Que tonta era! Si ni siquiera había hablado con ella desde hace dos años, ya apenas nos conocíamos.

Deje la foto mientras dejaba que las lagrimas resbalasen por mis mejillas.

A continuación me fije en otra foto que había al lado ¡Y menuda foto! éramos Niall y yo sentados en la hierba de mi jardín, besándonos. Oh ¡y creía que ya no podía llorar mas!. Se nos veía tan felices, en nuestras miradas se veía el amor que nos teníamos y yo lo había estropeado todo.

La verdad es que no había pensado en Niall desde que había vuelto y quería que continuase siendo así, no soportaba haberlo dejado, lo tonta que había sido dejándolo, me había olvidado completamente de el estos años, seguro que ya no quería saber nadada de mi.

Y me arrepiento mucho, muchísimo, creo que lo que vivi con el no lo voy a volver a encontrar nunca y que he perdido a la persona que mas quería en el mundo. Si, así soy de idiota.

En ese momento sonó el timbre y la verdad me había parecido muy raro ya que no le había dicho a nadie que estaba de vuelta y quería dejarlo así, quería que mi año sabático fuera en paz, sin molestias.

Pero parece que el destino no quiere que tenga es tranquilidad en mi vida, por que estoy segura de que quien hay en la puerta no va a hacer eso.

Seguía igual de guapo, su pelo rubio teñido ya no estaba hacia abajo ahora lo llevaba había arria y decir que le quedaba bien es poco, no se parecía a ese adolescente que acababa de salir de la pubertad del que me había despedido hace tres años, o no, lo que tenia aquí delante era todo un adonis.

Tenia unos músculos marcados y un pecho ancho en el que daban muchas ganas de recostase y los rasgos de su cara se habían estilizado ahora eran mas masculinos pero seguía conservando ese aire de niño que tenia.

Al igual que yo, el estaba paralizado mirándome, ninguno había dicho nada seguíamos en silencio observandonos, como si fuésemos la cosa mas extraña del mundo.

- ¿Lis?...- dijo con inseguridad - ¿eres tu?-.

- Niall...-.

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Y aquí esta el capitulo 4!!

Espero que os haya gustado y siento que sea tan corto, prometo que los intentaré hacer mas largos.

Por favor dejarme votos y comentarios, quiero saber si os gusta y o si no para intentar mejorar.

Besos, Natalia 💜

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⏰ Última actualización: Feb 13, 2014 ⏰

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