Capítulo 37 🌙

226K 24.1K 11K
                                    

Arianne

Quiero hundirme en la cama y nunca despertar. Me siento como una estúpida por caer en las provocaciones de Julianne. Caí en su trampa y ella consiguió lo que buscaba. Apuesto a que todos en la manada de Emmie me consideran una bruja malvada. Será difícil limpiar mi imagen.

Soy una tonta.

Me comporté como una niña caprichosa que no puede controlar sus impulsos. ¿Y Asher? Es paciente conmigo, pero no olvidaré la mirada que me dio ayer. Él me tenía miedo y con justa razón.

Desaté unas de mis peores facetas.

—Admito que me asustó ver esa parte de ti —Asher ingresa a la habitación con una bandeja —. Temí que no pudieras controlarte, pero no te veo como un monstruo, Arianne.

Lentamente me incorporo en la cama con las sábanas en mi pecho. El olor a café y pastel horneado me hace gruñir el estómago. Estoy hambrienta.

—Me siento como una tonta por someterme a su juego.

Se sienta en el borde de la cama.

—Sucedió y no hay forma de retroceder al pasado —me da una sonrisa comprensiva —. Lo importante es que estás bien y no pasó a mayores.

Desvío la mirada al pastel de vainilla.

—Lo que hice no tiene ninguna justificación.

—No, no la tiene —concede —. Pero con el tiempo aprenderás a controlarte y recordarás todo con una sonrisa. Serás tan poderosa que nadie va a poder detenerte.

Le doy el primer bocado al pastel y Asher me da una mirada de alivio. Mi lobito siempre cuidándome.

—Crees en mí más que nadie.

—Por supuesto que lo hago. Conozco tu historia y te entiendo. Sé lo que has vivido, estuve ahí muchas veces para sostenerte.

¿Por qué se empeña en ver todo lo bueno en mí? No lo merezco. Yo no merezco a alguien como Asher. Él es noble, tierno, el compañero perfecto. Presiento que en cualquier momento voy a lastimarlo y es lo que menos deseo.

—Quise matar a tu amiga —escupo la palabra "amiga" —. Quise reventar su corazón en su pecho.

Su expresión relajada no cambia.

—Julianne te dijo cosas horribles.

—Yo me metí en esa situación porque soy una idiota sin razonamiento —continúo —. Casi mato a Julianne y lastimé a tu hermano. ¿Quién seguirá después? ¿Tú, Asher?

Me entrega la taza de café y lo acepto con el ceño fruncido. ¿Nada de lo que digo le importa?

—No —contesta a mis pensamientos —. Si pretendes alejarme con tus palabras no funcionará. Te he visto en situaciones peores, Arianne. ¿Crees que me asusta lo que representan tus poderes? No —me toca la mejilla —. Tus acciones son normales porque estás aprendiendo y vas a equivocarte miles de veces. No será la primera vez que te caerás y yo estaré ahí para sostenerte.

Las lágrimas pican en mis ojos.

—Eres un terco.

—Estoy enamorado de ti —La sonrisa empieza a surgir en sus labios —. Te amo como un loco.

Mi corazón se olvida de latir unos cuantos segundos y ninguno de los dos respira. Mis ojos están amplios y mi pulso se vuelve frenético. Es la palabra que más me desarma, pero quiero decir la respuesta desesperadamente desde el fondo de mi alma porque el sentimiento es mutuo.

—También te amo, lobito.

Ambos sonreímos como dos tontos antes de compartir un beso dulce con sabor a vainilla.

Dulce Maldad [En Librerías]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora